Las supuestas amenazas de muerte contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, recibidas el viernes 11 a través de una interferencia en el equipo de comunicaciones del helicóptero presidencial H-03, enconderían una interna a todo o nada entre sectores de inteligencia oficiales y extraoficiales. Sus protagonistas integran el área de Inteligencia del Ejército, ex grupos carapintadas y el polémico Héctor Alderete, titular del portal Seprin, vinculado a los servicios de inteligencia.
La investigación judicial por las denuncias por amenazas –que podría desatar un escándalo de espionaje en el Gobierno nacional– quedó a cargo del juez federal Ariel Lijo. Fuentes judiciales aseguraron a PERFIL que se investiga la posible vinculación entre las amenazas y el inicio del juicio oral a ex represores de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), que comenzó ese viernes pocos minutos después de que el piloto presidencial escuchara cómo la marcha militar Avenida de las camelias interfería su comunicación con la Torre de Control del Aeroparque. De hecho, ese mismo viernes por la noche fue amenazado el hijo del fiscal de la megacausa ESMA, Eduardo Taiano.