Auditoría y nuevas ambulancias en la unidad médica

El Gobierno tomó la decisión de reformar a fondo la Unidad Médica Presidencial, el conjunto de médicos que se dedican a cuidar la salud de Mauricio Macri y su equipo. Los cambios incluirían la remoción del actual titular de la UMP, Marcelo Ballesteros, quien venía trabajando desde hace años con el kirchnerismo, y una reformulación del trabajo de la unidad.
Tras un extenso trabajo de auditoría del ministro de Salud, Jorge Lemus, junto con el secretario general, Fernando de Andreis, de quien depende la UMP, se tomó la decisión de actualizar el equipamiento de la unidad y coordinar el trabajo con los hospitales públicos de las zonas donde se mueva el Presidente. De hecho, el jueves Macri estuvo controlándose su fisura de costilla en el Hospital Fernández. También, la coordinación servirá para las urgencias donde haya que derivar al presidente o a cualquier paciente que esté cercano al primer mandatario.
En cuanto al equipamiento, se actualizarán los modelos de las tres ambulancias, que son añejos, al igual que el instrumental con el que cuentan. Para ello, se están buscando alternativas y se pidieron cotizaciones a Mercedes-Benz, entre otras marcas.
La UMP tiene ocho médicos que van rotando y están en contacto con el médico clínico de cabecera que trata a Macri hace años. Los ocho vienen de la gestión anterior. Ballesteros asumió como titular de la unidad cuando Luis Buonomo, el médico por excelencia de Néstor y Cristina Kirchner, dejó su cargo por problemas de salud. Ballesteros quedó a cargo, pero con una relación equidistante con la ex presidenta. Tanto Lemus, como el titular del SAME, Alberto Crescenti, comenzaron a trabajar en verificar el estado de la UMP. Crescenti avanzó sobre el sistema de urgencias mientras que Lemus se ocupó de la reformulación íntegra. La UMP tuvo mucho trabajo desde que asumió Macri: atendió de urgencia a un amigo del Presidente que falleció en la quinta Los Abrojos cuando jugaba al paddle, monitoreó los estudios de corazón que se realizó Macri hace diez días en la Fundación Favaloro y ahora se mantuvo cerca del dolor de costilla.