Amado Boudou sabe que sus días en libertad están contados. Por eso, las primeras horas afuera del penal de Ezeiza lo llevaron a un raid de actos y reuniones políticas en los que se metió en la pelea electoral y aseguró que el kirchnerismo "regresará en 2019, vamos a ganar, vamos a volver y vamos a cambiar este país".
El miércoles, el exvicepresidente fue liberado por segunda vez (la primera fue en enero). Aunque había prometido tomarse con tranquilidad su regreso a la actividad política, Boudou no cumplió con su compromiso e inició la expedición de la que sus amigos militantes le había recomendado alejarse.
A pesar de que fue inhabilitado para ejercer cargos públicos, el exfuncionario se subió al escenario frente a cientos de militantes kirchneristas que asistieron el viernes por la noche a la peña, en el club Ferrocarril Oeste, organizada por el Instituto Patria. Allí aseguró que "el 11 de diciembre de 2019 esto se acaba porque la situación material no da para más, están agrediendo no solo a los pobres, sino también a sus votantes. Pero sobre todo, esto se acaba porque hay una persona como Cristina Fernández de Kirchner que es capaz de sostenerse”. Estaban junto a él Oscar Parrilli y Carlos Zannini, los dos hombres de máxima confianza de la ex presidenta.
En las horas posteriores a salir de la cárcel, el ex vice de Cristina había coincidido con los dirigentes con los que aún mantiene contacto en que este era un momento de construcción política por fuera de la exposición mediática. Pero no resistió las invitaciones y se sumó a los actos a los que fue invitado. Horas antes de la peña en la que cantó y tocó la guitarra, participó de la Marcha de la Resistencia que organizan todos los años las Madres de Plaza de Mayo, en donde el ex vicepresidente eligió la canción La libertad para interpretar en el escenario.
Cómo funciona la tobillera electrónica que le van a colocar a Amado Boudou
El exfuncionario entiende que no es momento de exponerse, pero les advierte a los que le piden que vaya más despacio que en febrero podría volver a quedar detenido (después de la feria judicial) si la Cámara de Casación confirma su condena por realizar maniobras para quedarse con la imprenta Ciccone. Por ello, Boudou se sumó al acto del núcleo duro kirchnerista y en su discurso, en tono de campaña, apuntó al peronismo alternativo. "Nos dicen que hay un peronismo racional y que hay que ser racionales. Si ser racional es que el 1% de la sociedad se quede con todo y el 50% no tenga nada, yo no soy racional y lo quiero cambiar". Además, el ex vicepresidente apuntó contra Cambiemos y comparó al gobierno de Mauricio Macri con la dictadura militar. “El símbolo de la Argentina de Macri es Blaquier caminando, cagándose de risa en la calle, y Milagro Sala en cana. La dictadura fue cívico-militar y el modelo económico y social que quieren imponer es el mismo. Son las misma familias que están atrás de lo que hace Macri las que estaban atrás de los milicos".
Boudou ya tiene más invitaciones. A pesar de que lleva una tobillera electrónica que le impide alejarse más de 100 kilómetros de su departamento de Barracas, el dirigente podría sumarse a los actos que no impliquen una recorrida mayor a la permitida. Sin embargo, desde el Frente Patriótico que integra y del que participan Alberto Rodríguez Saá, Gabriel Mariotto y Fernando Esteche, entre otros, prefieren que, al igual que ellos, Boudou haga los movimientos políticos sin exposición mediática. Esperan que, después de estos primeros días, el ex vicepresidente finalmente cumpla con la promesa de bajar el perfil, incluso en las redes sociales, en las que contesta a cada usuario que lo increpa.