El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, anunció que recibirá a la familia del niño de la comunidad originaria qom asesinado a golpes en la ciudad de Villa Río Bermejito. "Nos solidarizamos con la familia y toda la comunidad qom. Se trata de un hecho policial que se investiga a los fines de su definitivo esclarecimiento. Mañana recibiré a su familia", comentó ayer el gobernador justicialista.
Por medio de su cuenta en Twitter, Capitanich dijo lamentar que "en las redes sociales pretendan involucrar al gobierno provincial" con el asesinato del niño Imer Ilbercio Flores, de 12 años, perpetrado con motivo de un festival realizado "a 100 metros del camping municipal" de Villa Río Bermejito, una ciudad ubicada a 340 kilómetros de Resitencia, la capital chaqueña.
El mandatario provincial instó a la Justicia a actuar con "celeridad" en un hecho que calificó de "lamentable" y por el que hay un hombre de 31 años detenido y acusado de ser el "presunto homicida".
En tanto, el secretario de Seguridad de Chaco, Javier Oteo, declaró a una radio local que todavía "no se han podido establecer las circunstancias ni las causales de este brutal homicidio", pero señaló que "no hay indicios de que se haya tratado de un crimen étnico ni racial", reprodujo el diario Data Chaco.
Por su parte, el dirigente Edilberto Pérez, de la comunidad originaria Qompi Naqona'a, que se encuentra establecida en la zona de El Impenetrable chaqueño, señaló que el niño fue separado por un hombre del grupo de amigos con el que había concurrido el viernes al festival. Según el relato de un testigo que citó Pérez, el niño "fue llevado a otro lado" por este hombre y otros cuatro integrantes, dijo, de una familia de apellido "Franco". "El muchacho vio que le pegaron garrotazos", manifestó el dirigente originario al canal TN.
El cadáver de Flores fue hallado a las 6 del sábado a 100 metros de la playa del camping municipal de Río Bermejito. "La paliza dada (al niño) hizo que la madre no pueda reconocer su rostro y se lo identificó porque quienes lo molieron a golpes, además, le cortaron parte de su piel donde había un tatuaje símbolo de su etnia qom", señaló anoche un comunicado que difundió la comunidad indígena. En el texto, acusaron del homicidio a un "criollo" llamado Nino Franco.
