La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró este domingo que al terminar su gestión en diciembre entregó "un país funcionando", pero el Gobierno actual "anuló lo bueno que había" y en consecuencia ahora "hay más cartoneros y gente en situación de calle".
En una extensa entrevista con el canal C5N, la ex presidenta cargó contra las políticas económicas de la administración de Mauricio Macri, al señalar que propone "un modelo de país que huele a modelo antiguo, agroexportador, con menos consumo interno. Este modelo necesita precarización", juzgó.
"Entregamos un país funcionando, con un índice de desocupación de 5,9 e inflación a la baja. El Gobierno (actual) profundizó los problemas que había y anuló las cosas buenas que había", enfatizó Fernández, que defendió la política de subsidios de su mandato, porque estuvo destinada a orientar "mayor plata al consumo y a la inversión también".
"Los subsidios estaban dirigidos a alentar inversión, sostener empleo, iban a comercio, industria, porque había una política de industrialización. Éramos capitalistas, no entiendo a estos capitalistas que no quieren que haya consumo", fustigó.
La ex mandataria alertó que el desempleo "va a aumentar" porque se "está rediseñando la economía. Si hay menos industria y comercio, va a haber menos trabajo registrado y más desocupación. Es el rediseño de una economía que nosotros la queríamos con consumo, que ahora parece que molesta".
"Hay más cartoneros y gente en situación de calle, es muy evidente. Es un fenómeno que se produce a partir de la pérdida y destrucción del trabajo, la suba de alimentos, la quita de retenciones, tarifazo y falta de una política como la que teníamos nosotros, de precios cuidados", planteó.
Respecto a la inflación, aseguró que es "más del doble" de la que había durante su gestión, producto de "la fenomenal devaluación, del tarifazo, y de que desapareció el rol del Estado respecto a tener políticas orientadoras de los precios". A modo de autocrítica, dijo que durante su gestión "no" tuvo con "el mundo empresario la vinculación que ellos estaban acostumbrados a tener", pero rechazó que se hable de la "herencia recibida" durante el actual gobierno.
"La sociedad que se recibió fue con plena ocupación, con los salarios más altos en términos de poder adquisitivo comparado en dólares con México, Chile, Brasil o Uruguay y un plan de obras públicas por 107 mil millones de dólares desde 2003", expresó. "Desendeudamos al país como nunca nadie lo había hecho. Lo recibimos en default y lo desendeudamos. Más que denunciarnos, deberían darnos un Premio Nobel", desafió.
Tras asegurar que "no" tiene "vocación de oposición, sino de construcción", reiteró que "hay que plantear un modelo alternativo, que no excluye a nadie", tal como dijo en abril pasado, cuando encabezó un acto frente a los tribunales de Comodoro Py, en el barrio porteño de Retiro.