La presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, cruzó al primer ministro de Israel, Benyamín Netanyahu, por su discurso en el Congreso de EE.UU., descalificó al exfiscal Alberto Nisman y a la acusación por encubrimiento que presentó en su contra.
En una catarata de tuits que acompañó con un posteo en su página, Cristina volvió a arremeter contra Nisman valiéndose de los dos escritos -uno reivindicacaba el pacto con Irán y otro no- hallados en su caja fuerte que divulgó el juez Daniel Rafecas. En los documentos, el exfiscal -según Cristina- “no sólo no hace ningún tipo de alusión a la denuncia, sino que presenta una postura diametralmente opuesta” y aseguró que también hizo “consideraciones sumamente positivas sobre la política del Gobierno argentino en la causa AMIA desde el 2004 hasta la actualidad”.
Reiterando parte del discurso ante la asamblea legislativa, Cristina afirmó que "la causa AMIA se había convertido en un tablero de ajedrez de la geopolítica internacional y de la política nacional” y remató sosteniendo que “para algunos, Argentina y AMIA sólo son un daño colateral en una guerra de la que nunca fuimos parte, ni queremos ser".
La mandataria retomó un discurso virulento contra el Estado de Israel e hizo foco en la presentación de Netanyahu que “sólo tuvo el objetivo de impedir que el Presidente Barak Obama llegue a ningún tipo de acuerdo con Irán sobre el Programa Nuclear”. En tanto, se permitió jugar con las fechas y dejó a entrever coincidencias del calendario y fechas históricas: " El 17 de marzo hay elecciones en Israel. Dos semanas después de que Netanyahu decidió ir a hablar ante el Congreso de los EEUU. Y por las licencias que se toma la historia, se cumplen 23 años de la voladura de la Embajada de Israel en Bs.As. Sin que hasta hoy, 4 de marzo, haya un solo detenido o un solo condenado. Igual que en la AMIA”, indicó.
