Papeles de un lado y del otro. El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, llegaron a la reunión con el Presidente Alberto Fernández con documentos para evaluar los últimos números que tienen que ver con el avance del coronavirus en sus jurisdicciones y así poder definir hasta dónde deberán dar marcha atrás con las flexibilizaciones del Área Metropolitana de Buenos Aires. "Si sigue la actual tendencia en los próximos días volvemos para atrás en AMBA y se endurecerán las medidas de aislamiento", admitieron desde Olivos al finalizar el encuentro.
Uno de los paper que llevó Kicillof tiene que ver el nivel de ocupación de camas de la Unidad de Terapia Intensiva de los distritos del AMBA (no incluye la Ciudad). Según pudo saber PERFIL, este gráfico muestra que el 4 de junio había 1322 plazas ocupadas y al 19 de junio hay 1950 sobre 3701 camas que incluyen al sector público y privado. De estas, 219 son pacientes con coronavirus. Además, en el sistema hospitalario hay 195 plazas ocupadas por ser casos sospechosos.
Según estos números, en esta zona en la que el avance del coronavirus arroja los mayores casos, hoy el nivel de ocupación de camas es del 52,6 %. “Cuando miras el primer cordón del conurbano en donde estás los distritos más populosos y cercanos a Capital Federal, ese número está más cerca del 58 %”, explican desde el gobierno bonaerense.
Cuarentena: el gobierno bonaerense quiere cerrar todo por 15 días
Hoy los tres funcionarios discutieron cómo atravesar el pico de la pandemia. En el gobierno Nacional y en el bonaerense coinciden en que se debe iniciar una etapa de “abrir y cerrar, abrir y cerrar”, para lograr un amesetamiento de la curva y deje de pegar saltos acelerados. “Necesitamos poder regular los números de infectados y frenarlos cuando el sistema esté cerca del colapso”, dicen cerca de Kicillof.
Desde el Gobierno detallaron que hoy se acordó que "lo importante hoy es administrar el número de camas. Si la tendencia actual continúa, en los próximos días tendremos que aprobar mayores restricciones". Esto significa que si durante los próximos tres días en la Provincia los números vuelven a subir a más de mil contagios diarios y en la Ciudad se acercan a 800, habrá un nuevo anuncio. "Todo indica que la situación va a empeorar, mucho y muy rápido", indicaron desde el Gobierno.
El gobernador bonaerense fue el primero en llegar a Olivos, poco después de las 12 del mediodía. Allí esperó a Larreta quien llegó 12.30, momento en que comenzó el encuentro. El jefe de Gobierno porteño fue el primero en retirarse, minutos después de las 14 horas.
"Cerrar y abrir, cerrar y abrir", la estrategia que juega Alberto
Esta semana, las tres jurisdicciones seguirán día a día la evolución de los casos, mortalidad, ocupación de camas y la velocidad de los contagios. “Vamos a monitorear y ver hasta dónde tenemos margen para poder frenar”, explican desde la Quinta de Olivos. Al igual que la semana pasada, estarán atentos a los números que comenzarán a aparecer desde mañana martes, cuando los números comienzan a arrojar un panorama más certero sobre dónde se está parado frente a la pandemia. Sucede que muchos laboratorios del país no funcionan durante los fines de semana por lo que los números del domingo y lunes de infectados suelen ser menores.
La extensión de la cuarentena se vence el próximo domingo 28 de junio. ¿El sistema sanitario y la curva de contagios pueden esperar al anuncio tradicional que Fernández hace antes de cada vencimiento? En Olivos creen que sí y por eso quieren ver la evolución de los infectados y camas ocupadas de esta semana. Si hay que anunciar un endurecimiento no será el de volver a fase 1, sino una medida intermedia. "El anuncio de la continuidad de la cuarentena será antes del fin de semana", detallaron en Olivos. Y agregaron: "Si sigue la actual tendencia en los próximos días volvemos para atrás en AMBA y se endurecerán las medidas de aislamiento".
Desde el Gobierno nacional descartan, por ejemplo, lograr menor circulación en el AMBA haciendo que deje de funcionar el transporte interjurisdiccional. “Deberían dejar de funcionar los trenes y lo único que se va a conseguir es que los colectivos exploten, que los que tienen que ir a trabajar se bajen de un colectivo que los deje en la General Paz, la crucen y se tomen otro colectivo. No es una idea que estemos evaluando”, dicen desde la Casa Rosada.
RA/MC
