La victoria de Diego Santilli en la primaria de Juntos todavía tiene una revisión pendiente. Si bien a esta altura está confirmado que sacó más votos que Manes, la Justicia electoral terminará de definir en los próximos días cuántos votos son de la lista del PRO y cuántos de la UCR. Si en la diferencia con el escrutinio provisorio del domingo es de dos centésimas, o más, en favor del radical, Jesús Cariglino quedaría con altísimas chances de ser diputado nacional.
En el territorio bonaerense el frente Juntos acordó que el orden en la boleta de la elección general se definiría según la cantidad de votos que aporte el perdedor de la primaria. Con el 97% de las mesas escrutadas en el escrutinio provisorio, la lista radical de Facundo Manes consiguió el 39,8% de los votos.
El 0,2% que falta para llegar al 40% es clave para definir quiénes integrarán la lista de la coalición opositora en la provincia. Si Manes llega a esta cantidad de votos en el escrutinio definitivo, que es el que realiza la Cámara Nacional Electoral, al radicalismo le corresponderá el 3°, 4°, 7°, 8° , 11°, 12° , 15°, 16°, 19°, 20°, 23°, 24°, 27° , 28°, 31°, 32°, 35° de los titulares y suplentes 3° , 4°, 7° y 8°.
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— Facundo Manes (@ManesF) September 13, 2021
Esto marca una presencia del radicalismo en la boleta de Juntos mucho mayor a la que esperaban en el comando de campaña de Diego Santilli. “Técnicamente es como si sacamos 40%”, destacó una fuente del radicalismo, aunque señaló que van a esperar al escrutinio definitivo para ver cómo queda la lista.
En caso de alcanzar esas dos centésimas y conseguir los 40 puntos, podría ingresar a la Cámara de Diputados Jesús Cariglino, que ocupó el séptimo lugar en la lista de Manes en la PASO. Esta posibilidad toma mayor dimensión si Juntos en la Provincia retiene la cantidad de votos que sacó en la primaria y lo dejó por encima del Frente de Todos. Con el 37,99% que marcó el resultado provisorio, le corresponden 15 de las 35 bancas que renueva la Provincia de Buenos Aires.
La presencia de Cariglino en la lista de precandidatos sorprendió a más de uno. El dirigente no tiene una buena imagen en la Provincia después de haber gobernado el municipio de Malvinas Argentina desde su creación, en 1995, hasta 2015. En varias ocasiones se lo acusó de usar la función pública para quedarse con terrenos públicos, como es el caso de la “Chacra Castellano”.
Cuando le preguntaron a Manes por la presencia del ex intendente en su lista contestó: “No podemos importar noruegos”. “La renovación pasa con que todos los de la lista se comprometan con la Argentina del conocimiento”, agregó. En tanto, Margarita Stolbizer, cuarta en la lista del domingo pasado, dijo que “no estaba al tanto” de la candidatura de Cariglino.
En caso de que el escrutinio definitivo ratifique los número del provisorio, a este dirigente le corresponde el séptimo lugar de la lista de Juntos, con pocas posibilidades de ingresar a la Cámara baja.
Viejas figuras reaparecen en Diputados
En este escenario, a Diputados volverán varios ex funcionarios estratégicos de la gestión de Cambiemos. Entre ellos se destaca al ex presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, que iría en el noveno lugar; el ex secretario de Medios Hernán Lombardi, en el décimo primero; el ex ministro de Educación Alejandro Finocchiaro, décimo tercero.
En la Ciudad la polémica se resolvió pocas horas antes de la elección. El candidato de la lista Republicanos Ricardo López Murphy iba a quedar en los últimos lugares, con pocas chances de entrar. Esto estaba por ser así porque a su espacio le corresponde el tercer lugar, y como la cabeza, María Eugenia Vidal, es mujer, todos los números impares serían para el mismo género.
Eso la ubicaba a la científica Sandra Pitta en esa posición y el ex ministro de Economía el décimo cuarto. Finalmente se acordó que el cuarto lugar quedaba para él y el décimo quinto para la científica.
La coalición de Juntos por el Cambio acordó entre las tres listas que fueron a la interna que se usaría el sistema D´hont para ubicar a los candidatos en la lista de la elección general. Este es el mismo método que se aplica para definir la cantidad de diputados que ingresan a la Cámara según el porcentaje de votos que reciban.
Además, acordaron que se necesitaba un piso del 15% de los votos totales de la coalición para competir en la general. Esto dejó afuera a Rubinstein y la lista de Adelante Ciudad que tuvo el 8%.
