El fiscal federal Federico Delgado comprobó la existencia de un Centro Clandestino de Detención que todavía no es reconocido como tal, y descubrió la base de salida de un grupo de aviones de la Fuerza Aérea que participaron de los vuelos de la muerte.
Se trata de la Primera Brigada Aérea de Palomar, donde la fuerza armada menos investigada hasta el momento mantuvo personas en cautiverio, las torturó y recibió detenidos de otros centros clandestinos dependientes del Ejército, que fueron subidos a aviones y lanzados vivos al mar.
La investigación de la Fiscalía Federal número 6 revela la existencia de "vuelos de la muerte", que duraban entre 20 y 30 minutos. Los aviones partían de El Palomar llenos de detenidos y regresaban vacíos. Los aviones utilizados fueron los Fokker 27 y los Hércules C-130, los únicos que permiten que sus puertas se abran en el aire sin despresurizarse.
Lea la nota completa en la edición impresa del Diario PERFIL.