A 72 horas de los incidentes que se vivieron frente a la Embajada de Israel, 10 militantes del Movimiento Teresa Rodríguez (MTR) fueron arrestados esta tarde. De esta manera se sumaron a los cinco manifestantes que se encuentran detenidos desde el domingo acusados de violar la ley antidiscriminación.
Luego de que en un allanamiento a un centro y comedor comunitario de Florencio Varela, donde se secuestraran armas de guerra y explosivos, los nuevos detenidos quedaron imputados por los delitos de "asociación ilícita agravada, daños, resistencia y desobediencia". A ello le agregaron los cargos de "tenencia de armas y acopio de explosivos".
Es que se les encontraron dos revólveres calibre 38, otro revolver calibre 32 y unas 20 bombas molotov, según indicaron a la agencia DyN fuentes judiciales. Las 10 nuevas personas detenidas, cuyos nombres no trascendieron, serán indagadas mañana por el juez federal Claudio Bonadío, a cargo de las investigaciones.
Bonadío ordenó los operativos a personal del Departamento Antidiscriminación de la Policía Federal y la comisaría primera de Varela, a raíz de las distintas diligencias y medidas de prueba dispuestas tras los incidentes del último domingo en el acto del 61 aniversario del Estado de Israel.
Los procedimientos salpican a integrantes del MTR, la rama piquetera del Partido Comunista que ahora integra la agrupación de izquierda Frente de Acción Revolucionaria (FAR). Cinco miembros de esa agrupación, Leonardo del Grosso, Viviana Segovia, Damián Vekelo, Daniel Tenzano y Osvaldo Vázquez, ya estaban detenidos por los incidentes.
Además del agravamiento por la ley antidiscriminación, los detenidos están imputados por el artículo 213 bis del Código Penal. Allí se condena con hasta 8 años de cárcel al que "organizare o tomare parte en agrupaciones permanentes o transitorias que tuvieran por objeto principal imponer sus ideas o combatir las ajenas por la fuerza o el temor, por el solo hecho de ser miembro de la asociación".
La defensa. El abogado Martín Alderete, defensor de los cinco militantes del FAR detenidos el domingo último, aseguró que "ninguno de los que presenciaron el allanamiento en Varela dijo haber visto que los policías secuestraran armas ni molotov, aunque sí vieron que se llevaban palos y banderas".
Por su parte, el abogado Gerardo Echeverri, uno de sus colegas, denunció hoy que hay detenidos que "presentan marcas importantes de golpes en sus cuerpos" y que "fueron golpeados por personas de civil que había ahí, que no puedo decir si eran policías o personal de seguridad".