El acto por el 1° de Mayo de las CGT y las CTA será también una despedida de Hugo Moyano y Antonio Caló, quienes ya avisaron su intención de dejar lugar a un nuevo liderazgo para permitir el camino hacia la unidad cegetista. La hoja de ruta para este proceso ya tiene dos fechas definidas: el 4 junio se convocará al Comité Central Confederal, que definirá el marco de la transición hacia el Congreso de Unidad, que se realizará el 22 de agosto. Allí se podría definir una dirección colegiada o proclamarse un nuevo secretario general. Aunque todos afirman que la definición está “muy verde”, una serie de gremialistas vienen afianzando sus posiciones y tendrán un lugar clave en la unificación. En particular, tres dirigentes han marcado un crecimiento en su importancia en los últimos años; Juan Carlos Schmid (CATT), Héctor Daer (Sanidad) y Andrés Rodríguez (UPCN). Schmid dirige un gremio pequeño, Dragado y Balizamiento, pero supo posicionarse como armador sindical de peso como secretario de la Confederación Argentina de los Trabajadores del Transporte (CATT). Daer, en tanto, niega a cada uno de sus interlocutores la intención de postularse, pero algunos de sus colegas lo ven como un dirigente con capacidad de articulación política y armado sindical. Rodríguez no suena como posible secretario, pero sí fue un armador clave en el proceso de unidad y podría ocupar un lugar en una eventual dirección colegiada. En la CTA Micheli, hay un fuerte cuestionamiento a su liderazgo desde el principal gremio de la central, ATE. El secretario general de los estatales, Hugo “Cachorro” Godoy, busca que Micheli dé un paso al costado, pero aún evita una disputa abierta. En la CTA Yasky, la figura de Roberto Baradel gana peso día a día.
