El corazón de San Telmo, sobre la histórica calle Defensa, fue el lugar elegido. Allí, mientras degustaban los canelones o el bife de lomo del chef Pablo Massey en el tercer piso de La Panadería de Pablo, los candidatos del PRO hicieron su primera reunión post elecciones.
A modo de terapia grupal, el anfitrión fue el asesor ecuatoriano Jaime Duran Barba, quien intentó trazar un panorama positivo de los resultados de las primarias e incentivar a los candidatos para que retomen la campaña con fuerza.
Lo escuchaban Gabriela Michetti y Diego Santilli, candidatos al Senado; un grupo de candidatos a diputados encabezados por Sergio “el Rabino” Bergman, el economista Federico Sturzenegger y Laura Alonso; el jefe de campaña, Horacio Rodríguez Larreta y el secretario general, Marcos Peña.
En este marco, Duran Barba dijo que los números que barajaba antes de la elección mostraban poco más de 35% pero que, a pesar de ello, la verdadera elección vendría en octubre. Les aseguró que Mauricio Macri sigue apareciendo como “lo nuevo” en el electorado y que en la segunda etapa de la campaña, donde pondrán “todas las balas”, el jefe de Gobierno tendrá un rol preponderante y hasta saldrá a pedir el voto de sus candidatos. De todas formas, el ecuatoriano admitió que Sergio Massa es hoy “la estrella” de la política. Para levantar el ánimo les dijo a los candidatos que todos habían mejorado su imagen un 25%.
En el almuerzo, que se realizó el miércoles, también se planteó qué hacer a futuro con el discurso con respecto al gobierno nacional. Duran Barba les planteó que, en rigor, la idea era apuntar lentamente a endurecer el discurso ya sabiendo que enfrente estarían Pino Solanas y Elisa Carrió. La idea es marcar las “incoherencias” del espacio (ver página 13).
Acompañado de su asesor, Santiago Nieto, Duran Barba adelantó que ya se encargaron una serie de sondeos de opinión y focus group, donde se reúne a un grupo de gente a debatir ciertos tópicos con el fin de obtener resultados concretos sobre cómo se están configurando los votantes porteños. Los resultados estarán en un par de semanas, cuando el ecuatoriano regrese de su viaje a México, donde asesora a Marcelo Ebrard, el alcalde del Distrito Federal de México.
Por su parte, Rodríguez Larreta intentó mostrarse positivo y dijo que fue una buena elección, que había que seguir con las inauguraciones como parte de la campaña. En ese punto Duran Barba les repitió a los candidatos que la imagen positiva de la gestión estaba alta (alrededor del 70%) y que había que traducir ese número en las elecciones. Marcos Peña defendió la campaña nacional y recordó los buenos resultados en Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba.
“Fue una evaluación de la elección, nada más, fue un tema interno”, intentó minimizar ante la consulta de PERFIL uno de los comensales, molesto por la pregunta sobre el encuentro. Durante el almuerzo Michetti tomó nota de algunos de los ejes que se charlaron mientras Bergman se mantuvo prácticamente en silencio.
También se habló de los medios de comunicación. A pesar de la buena sintonía que el macrismo tiene con el Grupo Clarín hubo críticas al diario, pedidos para que “no se lea”, e incluso uno de los candidatos llegó a decir que “el candidato de Clarín es Massa”.
