Mientras el mundo seguía mirando la situación en Libia y la evolución de Egipto, de repente y en medio de la medianoche porteña, la cuenta de Twitter de P.J. Crowley -el actual vocero de la Secretaria de Estado Hillary Clinton-, se refirió imprevistamente a la situación planteada días atrás con el avión de la fuerza aérea estadounidense requisado en Ezeiza. El portavoz norteamericano quiso nuevamente hacer énfasis, pero ahora públicamente en la Web, sobre el enojo de su país para con el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
“Estamos sorprendidos porque la Argentina ha elegido no resolver una simple disputa sobre equipos de entrenamiento. Y queremos todas nuestras cosas de vuelta", remarcó Crowley a través de la red social Twitter, en la cual muchos funcionarios suelen bajar línea. La cuenta de Twitter de Crowley es habitualmente seguida por centenares de periodistas tanto norteamericanos como de todo el mundo, por casi todo el gobierno de la administración Obama y varios congresistas estadounidenses.
En el día de hoy en la habitual ronda de prensa en el Departamento de Estado le consultamos al vocero Crowley acerca de este “twitazo” en la medianoche argentina. “Gracias por recordármelo”, nos dijo amablemente. Luego a los periodistas presentes les recalcó: “Estados Unidos ha enviado notas diplomáticas a la Argentina pero aún se están esperando respuestas”. Crowley volvió a manifestar, tal cual lo hiciera online, que Estados Unidos está sorprendido por el proceder de las autoridades argentinas y volvió a reiterar que su gobierno sigue reclamando los equipos sustraídos.
Recordemos que días pasados había dicho que el proceder de Argentina había sido por fuera de los “canales diplomáticos habituales”. El funcionario norteamericano de todas formas dio a entender que Estados Unidos sabe que la situación del embarque supuestamente con problemas ha caído bajo la órbita de la Justicia. Pero el vocero de Estado evitó responder si creía que este caso se había politizado debido a que el presidente Obama no incluyó en su proximo viaje a Brasil y Chile al menos una escala en Argentina. Sólo atinó a sonreir ante la consulta sin querer dar más detalles.
En general, en las últimas rondas con la prensa, el gobierno de Estados Unidos siempre ha querido demostrar que ha mantenido una buena relación histórica con la Argentina. Pero nadie puede negar que ese supuesto clima de “entendimiento” se ha ido agrietando en las últimas semanas. Cuando le consultamos acerca de esta relación fluida en el pasado, contrastada con las evidentes quejas de ambas partes, Crowley apenas respondió: “estamos shockeados”, intentando rápidamente cambiar de tema y olvidar Argentina por un rato.
(*) Especial para Perfil.com
