Hace unas semanas el dato corrió con la velocidad de una patada: Diego Kravetz, uno de los legisladores porteños que más le pega al macrismo en la Legislatura, practica Taekwondo desde hace dos años y medio. Y entre saltos y golpes de puño, sorprendió con su participación en el Campeonato Mundial de Taekwondo que se llevó a cabo en Londres.
Por entonces se mostraba feliz desde el viejo continente y publicaba imágenes en su cuenta en Twitter de las hazañas durante el entrenamiento: “Mi maestro me pide que visualice la pelea. Cierro los ojos, veo una hamburguesa. Soy Homero y voy a cobrar”, escribía @diegokravetz.
"El sueño de todo político es pegarle a un periodista", bromeó ante las cámaras de Perfil.com cuando aceptó el desafío de mostrar parte de su entrenamiento. Sin embargo, dijo que no hay nadie en la legislatura a quien le gustaría golpear. "Este es un deporte, son artes marciales, que uno practica para estar mejor, no para lastimar a nadie", comentó.
Krávetz decidió comenzar a practicar Taekwondo porque no hacía ejercicio y fumaba hasta "tres atados" (de cigarrillos) por día. "Empecé muy livianito, porque la verdad que el cuerpo no me daba. Pero por suerte ya dejé de fumar", confesó en un encuentro con Perfil.com en el que conversa y demuestra los secretos de esta disciplina.
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(*) de la redacción de Perfil.com
