El dólar blue alcanzó un nuevo máximo histórico ayer al cerrar en $ 522 y acumuló una suba de $ 31 en cinco días, la suba semanal más alta desde la salida del exjefe de asesores de Presidencia Antonio Aracre, cuando esa semana subió $ 34.
La divisa paralela subió por sexta ronda consecutiva y tras aumentar $ 10, una de las mayores subas en una sola rueda, la brecha con el tipo de cambio oficial se ubica en 96,1%, el nivel más alto en un mes.
De acuerdo con operadores del mercado, las trabas para llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el denominado “trade electoral”, impulsan todas las cotizaciones de la moneda norteamericana.
Según Andrés Reschini, analista financiero de F2 Soluciones, “es lógico, diría natural, que en Argentina tengamos presiones cambiarias en cercanía de un proceso electoral y más aún ante la extrema fragilidad del BCRA y la incertidumbre que imprime la negociación con FMI”.
“Todos estamos descontando que el Fondo Monetario Internacional va a seguir apoyando a la Argentina, pero a medida que pasa la semanas sin novedades, empieza a haber cada vez más incertidumbre, y ahí es donde la gente que tiene alguna liquidez en pesos, en general pequeños ahorristas o quien tiene plata en negro, que es la que opera en ese mercado blue, comienzan a operar”, agregó Aldo Abram, director ejecutivo de Libertad Y Progreso.
En abril pasado, tras la corrida cambiaria debido a la renuncia de Aracre, y tras conocerse el dato de inflación de marzo, el blue trepó hasta los $ 442. Esto se vió reflejado después en remarcaciones y que finalmente se contrastó con el dato del IPC del cuarto mes del año que fue del 8,4%.
La suba de esta semana puede provocar el mismo proceso.
Para julio ya se prevé que se ponga en jaque a la desaceleración de los últimos dos meses, debido a la incidencia del turismo y al mayor aumento de precios regulados y que de acuerdo a los datos de los primeros días del mes las consultoras estiman el índice se ubique en el orden del 7%.
En lo que va de 2023, el dólar blue acumula una suba de $ 176, después de cerrar el 2022 en $ 346. El año pasado, la divisa paralela perdió por segundo año consecutivo. El año 2021 cerró con un alza del 25,3% frente a una suba de precios que fue del 50,9%, y en 2020 la moneda norteamericana registró un salto del 111%, frente a un IPC del 36% anual.
Este año, el blue aumentó un 50,8% y no viene tan rezagado respecto a la inflación, que acumuló un 50,7% en el primer semestre.
En lo que va de la gestión del presidente Alberto Fernández, la moneda norteamericana paralela aumentó más de un 600%, por encima del IPC general, que acumuló de enero 2020 a junio 2023 un 503%.
La cotización nominal alcanzada el viernes por la divisa marginal fue la más alta desde que asumió el presidente Alberto Fernández, allá el 10 de diciembre de 2019, cuando cotizaba a $ 69,5. Luego, en noviembre del 2021 perforó por primera vez la barrera de los 200 y en julio del 2023 rompió el techo de los 300. Ese récord se produjo durante la crisis política entre la salida del entonces ministro de Economía, Martín Guzmán, y la renuncia de su sucesora en el cargo, Silvina Batakis.
Desde que Sergio Massa tomó el timón del Palacio de Hacienda, el miércoles 3 de agosto de 2022, el blue subió $ 224.
En tanto, el MEP o Bolsa trepó hasta los $ 501,8 y la brecha con el tipo de cambio oficial se ubica en un 89,3%, mientras que el contado con liquidación avanzó hasta los $ 510 y el spread con el oficial se ubicó en un 92,4%.
Por su parte, el riesgo país se ubicó en los 2.094. Luego de la salida de Aracre del Gobierno, el índice que elabora el JP Morgan subió hasta los 2.622 puntos básicos, a 24 puntos del índice tras la salida del Ministerio de Economía de Martín Guzmán.
Por otro lado, el BCRA terminó la jornada con compras por US$ 49 millones, pero en la rueda de yuanes totalizó ventas por 1.056 millones.
Sin embargo, las reservas internacionales brutas de la máxima autoridad monetaria se ecnuentra a punto de perforar los US$ 26 mil millones.
En casi tres semanas, el BCRA redujo US$ 5 mil millones, cuando el 25 de junio estaban en US$ 31 mil millones.