El último 19 de abril, el Consejo Deliberante de Florencio Varela aprobó por unanimidad -el Frente para la Victoria incluido- una Ordenanza que obliga al intendente Julio César Pereyra, a sus funcionarios, legisladores y jueces del municipio a presentar su declaración jurada y publicarla en la web comunal. Pasaron casi tres meses y el intendente favorito de los Kirchner no cumplió.
La Ordenanza se votó en consonancia con la iniciativa de la reforma judicial -ya convertida en ley- que impulsó Cristina Fernández de Kirchner para que los funcionarios públicos nacionales hagan conocer su riqueza. Sin embargo, en todo este tiempo sólo el autor de la Ordenanza, el concejal Mariano Camilletti (Nuevo Encuentro) y su compañero de bloque Héctor Salatino fueron los únicos que subieron a internet el detalle de sus bienes.
"Todos hablaban de transperencia, de calidad institucional, pero nadie presentó nada. Como Pereyra no la presenta, ninguno de sus funcionarios la va a presentar. Y él no la quiere presentar por la casa que denunció Perfil.com", opinó Camilletti, edil de Martín Sabbatella en Florencio Varela.
De hecho, este medio reveló el 29 de enero de este año que el presidente de la Federación Argentina de Municipios (FAM) fue denunciado ante la Justicia Federal por "estafa", "cohecho" y "asociación ilícita" por el presunto desvío millonario de fondos públicos del municipio entre 2007 y 2010 para realizar reformas de lujo en una casa que le compró a Aníbal Fernández.
Pereyra, quien hizo vínculos políticos con gobernadores K de todo el país a través de la FAM, también fue denunciado ante la Justicia Federal por irregularidades en el construcción del corsódromo de Florencio Varela, por licitaciones privadas nunca informadas y por fondos millonarios que le envió la Casa Rosada para el Parque Industrial (PITEC).
"El intendente de Florencio tiene un problema: si no pone nada, nadie le va a creer. Y si pone mucho la gente lo castiga, y estamos en medio de la campaña electoral. Pereyra ya tiene 22 años de intendente con varias denuncias de corrupción. ¿Tiene algo que esconder? ¿O tiene tantos bienes que no sabe por dónde empezar?", siguió ante la consulta de este medio el concejal de Nuevo Encuentro.
Por su lado, el concejal Dardo Otonello (PJ-Unión-PRO) señaló que aún está "pendiente" qué tipo de planilla o formulario se iba a presentar, dado que a nivel nacional ahora se utilizará el sistema de la AFIP, con mucho menos detalles sobre los bienes. Otonello igual coincidio en que "al Consejo Deliberante no ha llegado nada todavía" de las presentaciones de Pereyra y sus funcionarios.
Al no haber Boletin Oficial en los municipios, si el Poder Ejecutivo local no veta una ordenanza aprobada del Consejo Deliberante en los 10 días hábiles posteriores a su votación, esa ordenanza adopta carácter de "promulgada" (ocurrió a inicios de mayo).
En su articulo 9º, la ordenanza de Florencio Varela prevé la quita de hasta el 100% de las dietas para el funcionario que no la cumpla luego de los 30 días, lapso que ya transcurrió.
A todo esto, desde la Secretaría Legal y Técnica varelense señalaron a Perfil.com que "la ordenanza se aprobó, pero no estaban los procedimientos ni los formularios" y anunciaron que "en los próximos días se pondrá en funcionamiento". Según dijeron, "no hubo día que no se avanzara en esto". Incluso, en el área de Contabilidad del municipio aseguraron a este portal que Julio Pereyra "será el primero en presentar la declaración jurada".
A declarar. En las provincias y los municipios, la obligatoriedad en la presentación de las declaraciones de bienes depende de leyes distritales u ordenanzas municipales. Los gobernadores e intendentes han logrado hasta ahora esquivar la divulgación de su riqueza de forma regular, cosa que sí contempla la Ley de Etica Pública para funcionarios nacionales.
En la Provincia de Buenos Aires, por ejemplo, el vice Gabriel Mariotto impulsa una nueva ley para que Daniel Scioli y sus funcionarios estén obligados a rendir cuentas de su patrimonio. Y en Capital Federal, Mauricio Macri se presenta ante escribano con una declaración jurada para evitar cualquier sospecha sobre sus bienes.
(*) De la redacción de Perfil.com.