La causa que investiga la presunta persecución a sindicalistas a través del armado de expedientes judiciales en la provincia de Buenos Aires entró en una etapa de “tironeo”, y es que hay dos juzgados que se la disputan, por un lado en La Plata, encabezado por el magistrado Ernesto Kreplak, y por el otro con su par de Comodoro Py Marcelo Martínez de Giorgi.
La posible definición vendrá de la mano del juez de la Sala II de la Cámara Federal porteña, Eduardo Farah, puesto que, al tratarse de un incidente de competencia, la resolución se realiza de forma unipersonal.
El expediente se inició por la denuncia de la ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia Cristina Caamaño, quien consignó a la Justicia Federal de La Plata un video, hallado en los registros de la AFI, de una reunión realizada en el Banco Provincia de la Ciudad de Buenos Aires en junio de 2017.
En las imágenes se aprecia a 15 personas que posteriormente, y tras la investigación de Kreplak, fueron identificadas como empresarios de la construcción, ex funcionarios del gobierno bonaerense durante la gestión de María Eugenia Vidal y ex directivos del organismo de inteligencia dirigido por Gustavo Arribas.
“Si yo pudiera tener una Gestapo para terminar con los gremios, lo haría”, se escuchó decir en el video a uno de los participantes, que resultó ser Marcelo Villegas, ex ministro de Trabajo bonaerense. El juez Kreplak imputó a todos y cada uno de los que participaron de la reunión y los citó a indagatoria.
Luego de analizar los descargos por escrito, estrategia aplicada por la mayoría de los acusados, Kreplak les dictó la falta de mérito al ex ministro Roberto Gigante y a los empresarios de la construcción que estuvieron en la sede del Bapro. En el mismo fallo procesó al resto de los implicados, entre ellos el actual intendente de La Plata, Julio Garro.
En ese marco, varios procesados, entre ellos los antiguos directivos de la AFI Juan Sebastián De Stefano, Diego Dalamu Pereyra y Darío Biorci, buscaron trasladar la causa a Comodoro Py argumentando que los hechos se dieron en la Ciudad de Buenos Aires, y esto fue rechazado por Kreplak. Sin embargo, De Stefano fue por más e insistió, esta vez proponiendo un planteo de inhibitoria a Martínez de Giorgi, quien heredó la megacausa de espionaje a jueces, personalidades, políticos, sindicalistas y periodistas, donde el ex espía también está procesado por maniobras de inteligencia ilegales que en su momento investigó su colega de Lomas de Zamora Federico Villena.
Ante esto, Martínez de Giorgi formó un incidente y le planteó la inhibitoria a Kreplak; el juez platense rechazó el pedido de seguir interviniendo en el expediente al sustentar que, si bien los hechos se llevaron adelante en jurisdicción porteña, los procesados y las víctimas son de la Provincia y que no están involucrados en la megacausa de espionaje radicada en el Juzgado Número 8 de Capital Federal, por lo que bajo su criterio legal desaconsejó la acumulacion de expedientes por “razones de economía procesal y mejor administración de justicia”.
Dichos argumentos fueron rechazados por Martínez de Giorgi, quien a su vez elevó el incidente a la Cámara Federal porteña, donde resolverá de forma unipersonal Farah, quien previamente deberá escuchar la opinión del fiscal José Luis Agüero Iturbe.
En caso de fallar a favor de Kreplak, el incidente le será devuelto y el magistrado platense seguirá al frente de la causa. Si por el contrario se avala lo expuesto por Martínez de Giorgi, la Cámara porteña le requerirá el expediente a la Cámara Federal de La Plata. Sin embargo, ante una posible negativa de este último tribunal de alzada en este trámite, será entonces la Casación la que determine dónde deberá tramitarse.