Natalio Oscar, el hijo del célebre boxeador Ringo Bonavena, es un monotributista categoría B que suele viajar por el mundo sin darle explicaciones a la AFIP. El mundial de Sudáfrica 2010, las peleas en Las Vegas de Floyd Mayweather, son solo algunos ejemplos. Cuando la década kirchnerista estaba en pañales, el ex contador del Grupo Crónica le confesó a un amigo: “Estaba fundido, había perdido absolutamente todo pero de a poco empecé a levantar cabeza”.
El canal de cable Crónica facturó millones de pesos durante la campaña presidencial de Néstor Kirchner en el 2003. De hecho, emitía actos de campaña y discursos del, por entonces, gobernador de Santa Cruz con fondos de aquella provincia, como investigó en el 2003 el periodista Martín Sivak en TXT. Crónica facturaba a ese servicio como “cobertura de actos” y “publicidad” sin informarles a los televidentes que se trataba de espacios publicitarios y no de noticias. La violación de la ley motivó una denuncia del diputado nacional, Manuel Garrido, que aún no tuvo sentencia firme de la justicia. Según Garrido, en diálogo con Perfil.com, la investigación se ha reactivado.
La pobreza franciscana de Bonavena mutó en riqueza durante la década ganada. Con su madre, Dora Antonia Raffa, como titular formal de la firma Artesanías Ring SRL comenzó a facturar millones en pauta publicitaria al Estado junto al arquitecto José Carlos Castro Meny. La firma funcionaba en el barrio de Boedo como un negocio dedicado a la venta y fabricación de muebles. Pronto, ingresó Bonavena y, a pesar de conservar el cuit, la firma pasó a denominarse Administradora Ring. Así cambió el rubro por “proveedora de servicios y de apoyo a empresas”. Por ese entonces, Crónica era el canal de cable preferido del kirchnerismo para promocionar su gestión. La pauta superaba el millón y medio de pesos anual pero no se facturaba a través de Estrella Satelital sino por la firma de la madre de Bonavena.
Sólo en el período 2009 al 2013, el grupo Crónica ocupó el séptimo lugar entre los medios que más dinero habían recibido en pauta publicitaria K: $101,4. Recuerdan trabajadores despedidos del diario que, en el grupo Crónica, Bonavena se presentaba como el ahijado de Héctor Ricardo García y el contador que venía a sanear las cuentas. Llegaba de la mano de su estudio junto con Pablo Daniel Tasso: Estudio Tasso, Bonavena y asociados conformado el 23 de septiembre del 2011 ante el escribano Adrián Carlos Comas, el mismo con el que conformaría otra empresa Lisura SA el 26 de septiembre del 2013. Lisura había sido creada para la venta de chanchos. A finales de la década ganada, además de mudarse a un chalet en Villa Devoto y vanagloriarse de sus contactos políticos y sindicales, Bonavena había adquirido un campo en Coronel Pringles, manejaba autos importados y viajaba por el mundo. Como cualquier monotributista argentino.
Algunas de las irregularidades que Garrido denunció, durante su gestión al frente de la oficina anticorrupción, fueron la dirección fiscal de Administradora Ring que coincidía con una aseguradora de riesgo de trabajo (Lavalle 652), que facturaba más de un millón al año pero no presentaba balances, que tenía el CUIT de baja de oficio por decreto 1299, que decía tener menos de cinco empleados a pesar su inmensa facturación pero que no los tenía registrados en la Federación Patronal. Según los datos oficiales, Administradora Ring recibió $1.453.401 en el 2006 por pauta de Telam. Al año siguiente, le fue mucho mejor: $4.979.536, un 243% más superior a la inflación acumulada en diez años. En ese período de tiempo, fue el grupo de medios que, proporcionalmente, más aumentó su pauta publicitaria estatal. También recibió dinero para radio por 35 mil pesos. En seis meses del 2011, año de la reelección de Cristina Fernández de Kirchner, la Administradora de Bonavena obtuvo casi 10 millones de pesos: $9.907.738,94
Como secretario de Adeboar, una asociación vinculada al boxeo, Bonavena afianzó sus nexos con la Presidenta, La Cámpora –a través de Andrés “el cuervo” Larroque- y varios sindicatos. El domicilio fiscal de Adeboar coincide con el de su domicilio particular en Devoto. Larroque y La Cámpora inauguraron varios gimnasios de boxeo en el país, todos con el nombre de Ringo como si fuesen las escuelas, calles y museos con el nombre de Néstor Kirchner. En un acto político en el club Huracán, la propia Presidenta estuvo ubicada cerca del hijo del famoso boxeador. Bonavena le explicitó a su ex pareja, Marcela Giudice, sobre su “banca política”. Ante las denuncias públicas, de amenazas, violencia familiar, hostigamiento y persecución de Giudice en la justicia y en la redacción de Perfil.com, el kirchnerismo miró para otro lado.
El “Ni una menos” no se presentó a ayudar a Giudice. Cuando la ex pareja del hijo de Bonavena lo denunció ante la justicia, “Ringui” publicó en su facebook que Marcela abusaba de menores, secuestraba chicos y tenía una red de trata de blancas. La joven mujer le inició una querella por la que Bonavena fue intimado a retractarse. No lo hizo.
En un momento en que el kirchnerismo denuncia la corrupción de la productora de Fernando Niembro, en el entorno de Bonavena se preocupan de que su buen nombre no sea mancillado en la prensa “golpista”.
(*) Especial para la redacción de Perfil.com | Twitter: @luisgasulla
