Los dirigentes opositores fueron los primeros en encargar sondeos de opinión post 8 de noviembre. Sin embargo, horas después de los cacerolazos en todo el país, también los funcionarios oficialistas pidieron sus propias encuestas.
El primer peronista en solicitar un sondeo fue el gobernador cordobés, Juan Manuel De La Sota. El mandatario, que se muestra decidido a competir por la presidencia en 2015, le pidió a la consultora Management & Fit una muestra para conocer el ánimo de la gente después de la protesta más importante que enfrentó el kirchnerismo. En Córdoba, el reclamo convocó a 40 mil personas, pero la encuesta encargada no sólo es a nivel provincial, sino alrededor de todo el país.
Mauricio Macri contrató una muestra de la consultora Isonomía. Tiempo atrás, cuando la presidenta, Cristina Kirchner había anunciado la expropiación de YPF, el jefe de Gobierno porteño también le había pedido un sondeo inmediato para conocer la opinión de los porteños sobre la medida.
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