Cerca del mediodía, unas cinco horas antes de que hablara la vicepresidenta, ayer en el acto de la UOM; el ministro de Economía, Sergio Massa, calificó su propia gestión.
“Le hemos ganado a la incertidumbre y empezamos de vuelta a estabilizar nuestros fundamentos macroeconómicos”, dijo Massa en el lanzamiento de la obra de la línea eléctrica Alipiba II, en Bariloche. En el gabinete económico consideran haber superado ampliamente las metas que el propio titular de Economía se fijó para sus primeros 90 días de gestión.
Además, encontraron una receta política de fantástica aplicación para los objetivos del equipo: echarle toda la culpa al antecesor, Martín Guzmán. El autor de esa “incertidumbre” desde esta mirada, sin dudas, fue y es Guzmán quien, cabe recordar, fue designado directamente por el presidente, Alberto Fernández.
Massa, como reflejó este diario, dialoga y se reúne muchas más veces de las que se conocen públicamente con la vicepresidenta, Cristina Kircher. Ayer, causalidades mediante, CFK elogió directamente a Sergio Massa.
“El ministro de Economía está haciendo un gran esfuerzo administrando las consecuencias de lo que pasó”, enfatizó Cristina en el acto gremial.
De esta forma, Massa buscó resaltar los logros de su gestión en momentos en que la cotización del dólar se mantiene en torno a los $290 pero mientras que en Wall Street las acciones de las empresas nacionales que allí cotizan tuvieron una jornada con subas de hasta 15%.
Ayer entró en vigencia el dólar turista y el ministro de Economía señalo que “tomamos la decisión de reconocer un mejor tipo de cambios” y pidió al sector del turismo que “cuiden los precios”.
Massa no desconoce que la desaceleración de la inflación se hará esperar; por eso promueve resultados de su gestión. Y nunca abandonó sus frecuentes reuniones políticas, como las que mantuvo esta semana con los senadores que ya le dieron dictamen, sin modificar ni una coma, al Presupuesto 2023 que proyecta una inflación del 60% para todo el próximo año electoral. Esa meta está floja de papeles; tanto que el propio relevamiento de expectativas de mercado (REM) que se conoció ayer prevé que lo que está por venir en materia de precios sería aun peor.
Quienes mejor pronosticaron esa variable para el corto plazo esperan en promedio una inflación del 101,2% interanual.
Los participantes del REM revisaron las previsiones de inflación para 2023, ubicándola en 96% interanual (5,5 puntos más que el REM previo) y para 2024 en 69,6% (2,8 puntos superior al anterior relevamiento).
Enfocado, entonces, en la gestión, Massa, afirmó ayer que además de “estabilizar la macroeconomía”, hay que, en forma paralela, pensar en planes de desarrollo a mediano y largo plazo.
De esta forma, Massa buscó resaltar sus logros en momentos en que la cotización del dólar se mantiene en torno a los $290, otorgando cierta estabilidad cambiaria mientras busca alternativas para contener la inflación.
Massa habló durante el acto de lanzamiento de la construcción del electroducto ALIPIBA II y la interconexión con la ciudad de Villa la Angostura, proyecto que demandará una inversión de US$ 75 millones y demandará 48 meses de trabajo. También estuvieron la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, su par de Neuquén, Omar Gutiérrez; y la secretaria de Energía, Flavia Royón.