Los candidatos presidenciales de Alternativa Federal siguen firmes. Ninguno está dispuesto a declinar sus aspiraciones por la aparición de Roberto Lavagna, el último en incorporarse a esta lista. A menos de tres meses de la inscripción de los nombres que finalmente competirán contra Mauricio Macri, los dirigentes se muestran optimistas ante el crecimiento del espacio del que creen que el ganador será quien mejor tolere la carrera de resistencia.
“Se equivocan los que piensan que esto es una competencia de velocidad de 100 metros. Esto es un trabajo de resistencia”, dicen cerca de Juan Manuel Urtubey cuando preguntan sobre el futuro del gobernador de Salta y la instalación de Lavagna como candidato.
Coincide Sergio Massa, a quien algunos dirigentes le dicen que baje su postulación y acompañe al ex ministro de Economía que formaba parte de su equipo. El líder del Frente Renovador no encuentra ningún motivo para hacerlo. Cree que el “operativo Lavagna” fue lanzado por sectores del círculo rojo y mediáticos, pero que no está resonando en los votantes. Resiste mientras está convencido de que en las próximas semanas verá desvanecerse la figura del economista. Además, le acercaron un informe que lo tranquilizó. “Lo que tiene Massa no lo tiene Lavagna y viceversa. En base a lo analizado, Massa y Lavagna son más complementarios que iguales. El liderazgo que tiene Massa no lo tiene Lavagna, pero la gestión que proyecta Lavagna no la tiene Massa. Lo mismo sucede con los públicos: Massa con los jóvenes, Lavagna con los adultos mayores, Massa con los sectores populares, Lavagna con los altos”, es parte del análisis de un consultor que el ex diputado encargó. El tigrense asegura que la figura del economista no modificó su intención de voto y está dispuesto a pedirle que vaya a internas. “Yo no lo mando a la interna, lo manda la ley”, ironiza Massa cuando lo consultan sobre la posibilidad de que Lavagna sea candidato único de este espacio.
Otro factor que calma a los presidenciales es que los sondeos muestran una caída en la imagen del economista al momento de oficializar su intención de participar de las elecciones. Un informe de Poliarquía de marzo va en este sentido. “Roberto Lavagna perdió seis puntos de imagen positiva con respecto a nuestra anterior medición”. En el espacio también compartieron una encuesta de Gustavo Córdoba & Asociados que muestra que la imagen positiva del ex ministro bajó del 49% en febrero al 41,7 en marzo.
Por ahora, Lavagna no está dispuesto a competir en una interna. “La única chance es que mi viejo sea candidato es que todos vayan atrás”, es el mensaje que transmite Marco Lavagna a los otros candidatos. Para eso, necesita mostrar una diferencia de votos con respecto al resto de los postulantes. “Necesitamos un Lavagna de 20 puntos”, admite. Cuando le preguntan cómo se logra, no tiene respuesta.
Massa, Urtubey y Miguel Pichetto, quien tampoco muestra intenciones de bajar su candidatura, reflexionan: “Que Duhalde y Barrionuevo nos digan lo que tenemos que hacer por los diarios es un poquito mucho”, sobre el operativo del lanzamiento de Lavagna.
La mesa coordinadora de Alternativa Federal volvió a funcionar esta semana después de varios días de inacción. Allí se juntaron representantes de todos los candidatos más el senador Carlos Caserio, en nombre del gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti.
Ratificaron la necesidad de ir a internas para darle fuerza al espacio y le dieron la bienvenida a la candidatura de Lavagna para potenciar el espacio, siempre que esté dispuesto a ser uno más. “Si compite, podemos llegar a mostrar una fuerza de más de 30 puntos, es una pena que quiera jugar una elección personal y terminar sacando 13 puntos”, se lamenta uno de los candidatos a presidente.