A pesar de que Juntos por el Cambio da una permanente imagen de tensión y pelea, la radiografía del momento muestra que las mayores crisis se están dando hacia adentro de cada uno de los espacios y no entre los partidos políticos que conforman la alianza. Radicales y macristas, principalmente, están teniendo hoy más diferencias internas y, a la vez, van consolidando y aceitando sus vínculos con dirigentes de los partidos asociados.
“Hoy los partidos parecen pintados y quizás eso sea positivo para la consolidación de Juntos por el Cambio”, reconoce un diputado del interbloque que ve como en cada debate legislativo los alineamientos no se dan siempre por disciplina partidaria. La lógica de halcones y palomas (o duros y moderados) va calando y generando afinidades entre dirigentes de diferentes partidos.
Así, se multiplican también las reuniones, con y sin fotos, entre referentes de diferentes partidos. Mauricio Macri, por ejemplo, recibió el último miércoles en su casa a tres radicales y dos lilitos. Se organizó justo después de que Facundo Manes lo criticara y recibiera una catarata de reproches. Invitó a cenar al gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, y los diputados radicales Rodrigo de Loredo y Martín Tetaz, y Juan Manuel López y Paula Oliveto de la CC-ARI.
En la discusión interna, Valdés es de los radicales que más impulsa la candidatura de Manes, y evitó sumarse a las críticas que le dispensaron sus correligionarios Gerardo Morales y Martín Lousteau, entre otros. Sin embargo, en la cena se mostró en sintonía con Macri e incluso le preguntó cuándo iba a hacer un acto político en Corrientes, recordando lo que fue la campaña de 2019.
De Loredo, por su parte, había estado un día antes en Exaltación de la Cruz con Elisa Carrió hablando de la interna cordobesa, donde quiere ser gobernador. Allí también los partidos tienen sus internas. Mientras De Loredo sigue a los tironeos con su correligionario Mario Negri, en el PRO también se dividen: Macri lo viene apoyando al radical mientras que Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich se inclinan por Luis Juez.
En el PRO, la pelea entre Rodríguez Larreta y Bullrich tuvo un nuevo capítulo esta semana, con las críticas de la titular del PRO al proyecto que prohíbe los desalojos en villas que votaron los diputados de su bloque. Fue una ministra porteña, María Migliore, la que salió públicamente a contestarle.
El lunes 24 Macri presenta su libro en La Rural y las presencias serán motivo de análisis
Mientras tanto, cada vez que pueden Larreta y Bullrich buscan mostrarse con algún socio. El jefe de Gobierno porteño afina el vínculo con Lousteau en la Ciudad, mientras que tensiona con Jorge Macri, el candidato de su partido mejor posicionado. El viernes, además, compartió panel y mostró buena sintonía con Gerardo Morales, quien se divide intentando mostrarse como titular de la UCR y a la vez como precandidato presidencial. En la semana, en tanto, se reunió con Bullrich para hablar, según dijeron, de los programas que debaten las fundaciones partidarias. Se encargaron de difundirlo, con foto. Cada imagen suma.
Después de haber sido uno de los responsables de tensionar puertas adentro de JxC, ayer el gobernador jujeño se mostró moderado. “Lo que pasa en el Frente de Todos sirve para aprender. Las nuestras son cuestiones lógicas por el reacomodamiento por liderazgo que viene y por la orientación de la coalición. No tiene nada que ver con la crisis estructural del FdT. La verdad es que estamos mucho mejor de lo que se ve a veces, con diferencias que son lógicas pero no ponen en riesgo la coalición”, aseguró en diálogo con Radio Continental.
En una semana, en tanto, un nuevo evento dará que hablar por las presencias y ausencias de los referentes de JxC. Será la presentación del libro “¿Para qué?” de Macri, que se hará el lunes 24 en La Rural. Las invitaciones ya se empezaron a cursar y se espera una amplia presencia aunque algunos tengan más ganas de ir que otros.
