En medio de su gira estadounidense, Cristina Fernández de Kirchner recibió a un grupo de empresarios e inversores para un encuentro informal, en el que los hombres de negocios le plantearon sus quejas por la seguridad jurídica en Argentina pero también se mostraron interesados en invertir en el país.
El encuentro tuvo lugar, a puertas cerradas, en el tercer subsuelo del hotel Four Seasons, donde se aloja la Presidente. Asistieron directivos de importantes compañías estadounidenses, como Barrick Gold, Boeing, Brightstar, Bunge Limited, Cargill, DirectTV, Fox International, General Motors, IBM, Microsoft, Pfizer y Wyse Technology, informó el diario La Nación.
"Sé que hablar de intervencionismo del Estado no suena muy bien en los Estados Unidos, pero ya vimos adónde nos llevaron aquellos que sostenían que el mercado podía sustituir al Estado", comenzó Cristina al dar inicio a la reunión, y afirmó que "Mientras algunas consultoras que ya no pronostican más nos decían que la Argentina no iba a crecer y no iba a poder hacer frente a sus compromisos externos, nosotros hemos cumplido todos y cada uno de esos compromisos, a partir de una política activa desde el Estado que nos permitió mantener los niveles de reservas y poder enfrentar la crisis de mejor manera que en otros lugares del mundo".
Luego se dio lugar a las preguntas de los empresarios: Bruce Churchill, presidente de Direct TV Latin America, preguntó por la finalización del contrato entre la AFA y TSC (que poseía los derechos de televisación de los partidos), ya que su empresa era socia de TSC y se vio perjudicada por el cambio.
" Nosotros no tuvimos nada que ver en eso, es una relación entre ustedes y la AFA, y ellos fueron quienes terminaron con el contrato", respondió la mandataria. El mes pasado, el titular de la AFA Julio Grondona había declarado que "todo el mérito" en la estatización del fútbol "es de Cristina" .
También se mencionó la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual que impulsa el Gobierno. Hernán López, de Fox International Channels, dijo que estaba de acuerdo con el proyecto porque permitirá que el sistema de medios se adapte a los nuevos tiempos, según dijeron voceros de la reunión a La Nación. No obstante, pidió que las empresas extranjeras no se vean perjudicadas frente a los inversores argentinos.
Por su parte, Tarkan Maner, CEO de Wyse Technology (una de las fabricantes de celulares más grandes del mundo), mostró interés en invertir en Tierra del Fuego por la ley de promoción de inversiones. Cristina presentó esa iniciativa para impulsar la radicación de fábricas de productos tecnológicos y convertir a esa provincia en "la Manaos de Argentina".
La presidente salió contenta del encuentro y afirmó que había sido "muy positivo". Horas después, tuvo un cruce con Dominique Strauss-Khan, director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI). Cristina no se cansa de criticar a este organismo a pesar de que uno de los objetivos del viaje es conseguir la reapertura del crédito externo. El lunes, además, Cristina sufrió el reclamo de los acreedores privados de la deuda argentina frente a las puertas del hotel.
La agenda de la comitiva continúa hoy en la 64º asamblea de las Naciones Unidas, en Nueva York, donde Cristina dará un discurso. Mañana viajarán a Pittsburgh, Pennsylvania, para la cumbre de presidentes del G-20. El viernes 25 de septiembre volarán hacia la Isla de Margarita, Venezuela, donde se realizará un encuentro de mandatarios de América Latina y África.