En una dura carta abierta publicada hoy, el ex Jefe de Gabinete del kirchnerismo, Alberto Fernández, criticó sin reparos las expresiones manifestadas por la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner en el libro biográfico "La Presidenta" de Sandra Russo.
En el texto se consignan unas frases que despertaron la indignación del máximo hombre de confianza que tuvo Néstor Kirchner durante su campaña y presidencia. Según consta en la misiva, Cristina habría acusado a su ex ministro coordinador de: no apoyar su candidatura presidencial en 2007, operar a favor del Grupo Clarín, y de entorpecer el progreso de la nueva ley de medios.
"Entre los dichos sostiene usted que el Grupo Clarín ejerció, hace cuatro años, una enorme presión para impedir que usted fuera candidata a presidente, y que yo era, hacia dentro del Gobierno, el "vocero" de esa corporación empresaria", comienza su diatriba dada a conocer este miércoles en la edición impresa del diario La Nación.
El ex funcionario destacó: "Leí sus expresiones con pesar. Se trata exactamente del pesar que provoca descubrir la mentira en boca de una persona con quien se ha compartido una etapa central de la vida del país".
Alberto Fernández desmiente haber tenido vínculos "políticos, profesionales o económicos" con el Grupo Clarín ni haber sido su "vocero". Luego, tras recordar cómo acompañó el inicio de la carrera de Néstor K., subrayó: "Sólo respondí a sus órdenes y no defendí ningún otro interés".
Y lanzó: "Los argentinos sabemos de sus cruzadas. Algunos, incluso, la hemos acompañado en muchas de ellas. Créame que no hace falta fabular batallas para parecer heroica".
Asimismo, la severa respuesta de Fernández compara el Gobierno oficialista con el Estado descripto en la novela "1984" de George Orwell. Allí, "existe un 'Ministerio de la Verdad' dedicado a manipular o destruir los documentos históricos, para que las evidencias del pasado coincidan con la versión que de la historia quiere imponer el gobierno en cada coyuntura". "Tal vez sus aseveraciones pueden entenderse como un intento de trastocar lo ya sucedido y construir una historia que, acomodada a sus actuales conveniencias, le haga más llevadero aquello que le resulta difícil de explicar", apuntó.
Por último, el ex funcionario que se desempeñó en su cargo entre 2003 y 2008, afirmó creer que la Presidenta "construye un relato propio sobre la realidad que ampare el mundo dual en el que vive". "No voy a poder dar por cierta la historia novelada que nos propone como verdad absoluta", concluyó.