El Departamento de Justicia de los Estados Unidos propuso que la Justicia argentina pida la colaboración al FBI en la investigación sobre el pago de sobornos de la constructora Odebrecht a funcionarios argentinos. A raíz del ofrecimiento, el Ministerio Público Fiscal solicitará formalmente la colaboración del organismo. Así lo confirmaron fuentes judiciales a PERFIL.
La posibilidad de sumar al FBI surgió hace dos semanas, durante un encuentro entre el fiscal Sergio Rodríguez, a cargo de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA), y el fiscal John Beasley, de la División Penal (Criminal Division) del Departamento de Justicia.
Odebrecht llegó en diciembre a un acuerdo de colaboración con Brasil, Estados Unidos y Suiza para entregar pruebas del pago de sobornos de la compañía en Brasil y otros 11 países –entre ellos la Argentina–, que además se canalizaron por el sistema financiero de los Estados Unidos. El FBI trabajó en conjunto con el Departamento de Justicia y con la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) –el organismo encargado de controlar a las empresas que cotizan en Wall Street– para lograr ese pacto.
Los brasileños confesaron cómo funcionó la red de corrupción. A diferencia de Brasil, que mantiene el secreto de las pruebas sobre Argentina hasta el 1º de junio, Estados Unidos divulgó gran parte de las confesiones de los ejecutivos arrepentidos en un documento que PERFIL dio a conocer en diciembre. Allí, los brasileños describieron la maniobra y confesaron que Odebrecht pagó en Argentina sobornos por US$ 35 millones entre 2008 y 2014. En esa investigación está la clave del aporte que puede llegar a hacer el FBI en la investigación argentina. Los nombres de los arrepentidos y de los acusados aún no se dieron a conocer.
En el Departamento de Justicia también informaron que vienen recibiendo varios pedidos de colaboración de jueces y fiscales argentinos en las distintas causas que involucran a Odebrecht, y pidieron coordinación por parte de los investigadores argentinos para canalizar de forma conjunta esos pedidos. Todas las solicitudes se basan en una misma fuente de información: el acuerdo entre las autoridades de Nueva York –donde se cerró la negociación con la brasileña– y Odebrecht. Allí estarían los nombres de los ejecutivos que confesaron haber pagado coimas y las identidades de los funcionarios argentinos sobornados. También detalles de los pagos y de los intermediarios.
Rodríguez investiga el capítulo argentino del Lava Jato y asiste a los fiscales federales que llevan adelante otros casos el pago de sobornos en el soterramiento del Sarmiento –que involucra al ex secretario de Transporte Ricardo Jaime y a Iecsa, la constructora de Ángelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri–, los pagos que habría recibido Gustavo Arribas, jefe de AFI; y el caso de obras de la constructora en AySA.