Los pasajeros provenientes de Brasil, México y Chile que arriben durante este fin de semana al país serán testeados, en tanto que a partir del lunes la medida será extensiva a la totalidad de los vuelos que ingresen al país. Esta medida se tomó en el marco de lo dispuesto por el gobierno nacional para frenar el impacto de la segunda ola de coronavirus y las nuevas cepas que se registran en la región.
Según informaron fuentes oficiales, los pasajeros provenientes de vuelos de esos tres países serán testeados este fin de semana “antes de abordar el avión, al llegar al país y otro testeo al séptimo día de ingreso”, mientras que desde el lunes la medida abarcará a la totalidad de los vuelos que lleguen a Ezeiza.
A partir de ese día entrará en vigencia plena la Decisión Administrativa 268/2021, publicada el viernes en el Boletín Oficial, que estableció la prohibición de los vuelos provenientes de México, Brasil y Chile, países con mayor riesgo epidemiológico.
Según la información oficial, se trata de unos 1.060 pasajeros que ingresarán el fin de semana provenientes de estos tres países, a quienes en caso de dar positivo para Covid 19 en los testeos, deberán permanecer aislados en un hotel de la ciudad de Buenos Aires “hasta tanto las pruebas de secuenciación genómica indiquen si se trata de los linajes que son considerados de mayor riesgo epidemiológicos por su alta infectividad”.
En ese sentido, se aclaró que en caso de confirmarse que se trata de la cepa de Manaos o Reino Unido, los pasajeros deberán completar el aislamiento en el hotel.
Por el contrario, si se confirman las cepas que ya tienen circulación comunitaria en Argentina, podrán completar el aislamiento en sus casas u otros dispositivos provistos por las jurisdicciones.
Finalmente, se recordó que todos los pasajeros provienen con test de PCR negativos realizados hasta 72 horas previas al abordar el avión.
Los casos de coronavirus en Argentina aumentaron esta semana un 17% respecto a los 14 días previos, porcentaje que marca un crecimiento con ritmo lento pero sostenido en las últimas tres semanas.
Este crecimiento de la curva se da en un contexto regional donde países como Brasil o Chile atraviesan una situación sanitaria compleja, por lo que especialistas advirtieron sobre la necesidad de “redoblar los cuidados” para evitar un impacto fuerte de la segunda ola.
Analizan más restricciones sin afectar la producción
El gobierno nacional sigue con atención el creciente número de casos de coronavirus en la región e implementa, desde este fin de semana, medidas para reducir lo más posible el ingreso de nuevas cepas, con la prohibición de vuelos procedentes de Brasil, Chile y México, pero advierte que ante un aumento exponencial evaluará “medidas muy específicas y localizadas”, siempre “sosteniendo las actividades productivas y económicas”.
Luego de los testeos a los pasajeros que regresan este fin de semana desde Chile, México y Brasil, a partir del lunes entrará en vigencia plena la Decisión Administrativa 268/2021, publicada el viernes en el Boletín Oficial, que estableció la prohibición de los vuelos desde estos destinos con mayor riesgo epidemiológico.
Mientras tanto, los funcionarios nacionales siguen de cerca las cifras que se registran en el país día tras día: el viernes otras 143 personas murieron y 12.936 fueron reportadas en las últimas 24 horas en la Argentina, lo que representó la cifra más alta en 72 días, contra 13.286 casos positivos del 14 de enero último.
En ese sentido, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, dijo en declaraciones a Radio 10 que se viene “observando una tendencia de aumento de casos” en la mayoría de las provincias, pero que como hubo un feriado esta semana, se analizará el promedio de los próximos días para evaluar si efectivamente hay una tendencia creciente.
En esa línea, las autoridades sanitarias ven con atención el flujo de circulación que aumentará con la Semana Santa y llaman a extremar los recaudos.
No obstante, Vizzotti volvió a descartar un confinamiento total en caso de que los casos sigan aumentando, pero habló de la posibilidad de evaluar, con las provincias y los municipios, “medidas muy específicas y localizadas” manteniendo “las actividades productivas y económicas así como la actividad turística”.