Con el foco puesto en las pequeñas y medianas empresas, el Poder Ejecutivo envió al Congreso un nuevo proyecto para modificar el Impuesto a las Ganancias a sociedades que sube la presión fiscal sobre las grandes compañías y aliviana la carga para las de menor porte.
En marzo pasado, el ministro de Economía, Martín Guzmán, ya había enviado un texto que ingresó en la Cámara de Diputados pero las escalas de pago establecidas fueron objetadas incluso por el oficialismo y ni siquiera comenzó a ser tratado en comisiones.
En ese contexto, el Ejecutivo revisó las cifras y mandó un nuevo proyecto en el que se estima que el 90% de las empresas pagarán menos impuestos. De acuerdo a la nueva escala, las empresas que tengan una ganancia neta de hasta $ 5 millones pagarán el 25%, las que se encuentren entre esa cifra y los $ 20 millones pagarán el 30% y las que superen ese nivel tendrán que aportar el 35%. En tanto, los dividendos distribuidos pagarán en todos los casos la alícuota del 7% a través del impuesto cedular vigente.
“Adoptar este esquema permitiría incrementar la recaudación tributaria del impuesto sin afectar (de hecho, beneficiando) a las empresas de menores ganancias”, indica el texto que comenzará a tratarse en Diputados y que de acuerdo a la información parlamentaria estará entre las prioridades de la agenda, ya que es necesario compensar el costo fiscal de la sancionada reforma al Impuesto a las Ganancias para trabajadores en relación de dependencia.
