Jorge "Corcho" Rodríguez denunció y recusó al fiscal federal Federico Delgado, quien pidió su indagatoria en la causa por presunto pago de coimas de la firma Odebrecht.
En un escrito, el empresario denunció al funcionario judicial por "violación de secreto". Además, pidió que sea apartado por supuesta "pérdida de objetividad" de este caso.
Rodríguez es investigado como supuesto nexo entre la empresa brasilera y funcionarios argentinos, para el presunto pago de coimas para la adjudicación de la obra de AySA de una planta potabilizadora en Tigre ("Paraná de las Palmas").
El empresario, cuyos bienes fueron inhibidos por disposición del juez Sebastián Casanello, dijo que Delgado introdujo "por arte de magia" una sospecha "absolutamente infundada" para "encaminar la investigación en su contra", según informaron fuentes judiciales a la agencia Noticias Argentinas.
Rodriguez cuestionó que Delgado incorpore como prueba los dichos del contador Carlos Dentone, quien ante la Justicia lo señaló como el dueño de Sabrimol Trading, la firma radicada en Uruguay y sospechada de recibir sobornos de Odebrecht. La defensa del empresario adujo que Dentone no era un testigo, sino un imputado, y que por eso la incorporación como prueba de sus declaraciones fue irregular.
"En ninguna parte Dentone dijo, ni surge de la información recibida, que Sabrimol Trading S.A. fue utilizada para canalizar pagos espurios de la empresa Odebrecht, y lo que la información confirma es que quien suscribe no era titular de dicha sociedad. Lo demás resulta pura subjetividad del agente fiscal", advirtió el empresario.
Rodríguez además denunció a Delgado por "violación de secreto", ya que se filtró parte de la prueba que luego se utilizó para pedir su indagatoria. La denuncia penal recayó ante el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, en tanto que la recusación fue hecha en el marco del expediente Odebrecht, a cargo de Casanello.
Los abogados del empresario, Alejandro Novak y Eugenio Blanco, recusaron a Delgado y pidieron separarlo de la causa al advertir que "la actuación del fiscal no sólo no es objetiva, sino que vulnerando garantías constitucionales básicas como la del debido proceso, la propia ley, persigue ciegamente a Jorge Rodríguez, incapaz ya de distinguir, no ya entre lo justo y lo injusto, sino entre lo legal y lo ilegal".
Además, calificaron a la conducta del fiscal como "absolutamente maliciosa y constitutiva de enemistad manifiesta".