La Cámara de Diputados entró en un nuevo tira y afloje luego de un pedido de sesión especial realizado por la mayoría de los bloques parlamentarios con excepción de Juntos por el Cambio y que fue ratificado por el presidente del cuerpo Sergio Massa con una convocatoria a sesionar el próximo martes. Desde la coalición del ex presidente Mauricio Macri, amenazan con judicializar la sesión.
Por un consenso entre los distintos espacios que componen la Cámara Baja, en abril pasado se acordó sesionar de manera remota y se aprobó un protocolo de funcionamiento que fue prorrogado en una oportunidad pero que venció el pasado 7 de agosto. Hasta el momento, no están dadas las condiciones para avanzar con una nueva sesión pero esta situación se podría destrabar el martes en una reunión de Labor Parlamentaria con todos los jefes de bloque.
El interbloque de Juntos por el Cambio insiste en que no quiere tratar el proyecto de Reforma Judicial de manera virtual y es por eso que ya anticipó que no dará su aval para una prórroga del protocolo por un mes, como se realizó anteriormente, sino que solo podría tener en cuenta una prórroga sesión a sesión.
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El temario del martes incluye uno de los asuntos por los que más batalló la oposición que son las medidas para sostener al sector del turismo y la gastronomía, y por otra parte, el proyecto del Ejecutivo para elevar las multas a las infracciones por pesca ilegal, ambos sin dictamen aún pero con media sanción en el primer caso. La conformación de este temario no conflictivo fue una jugada que encaró Massa para tirar la pelota del lado de Juntos por el Cambio y dejarlos en evidencia en caso de que no participar de una sesión con temas de relevancia para la economía en pandemia.
Ante la convocatoria que firmó el Frente de Todos y otros bloques como el de José Luis Ramón, los lavagnistas de Consenso Federal, los integrantes de Córdoba Federal y el socialista Luis Contigiani, entre otros, Juntos por el Cambio convocó a una reunión de mesa chica ayer por la tarde en la que amenazó con judicializar el proceso en el caso de que no prorrogue el funcionamiento virtual de acuerdo al protocolo, con el consenso de todas las fuerzas.
Su postura fue confirmada a través de un comunicado en el que chicanearon a Massa y le pidieron conocer “los protocolos sanitarios para garantizar la sesión de forma presencial o nos convoque a acordar el modo en que lo haremos y el plan de labor que eventualmente surja del consenso con temas cuya urgencia amerite su tratamiento”. Aclararon que se reservan “el derecho de accionar judicialmente contra cualquier intento de vulnerar las reglas que este cuerpo ha fijado para el funcionamiento telemático”.
