La audiencia de conciliación entre el Gobierno nacional y Córdoba, convocada por la Corte Suprema, no llegó a buen puerto. De hecho, terminó sin acuerdos y con un indisimulable clima de tensión, en medio del reclamo de la provincia por 1.040 millones de pesos por un acuerdo sobre deudas previsionales.
Más de dos horas duraron las deliberaciones en el Salón Bermejo del Palacio de Tribunales. Fuentes judiciales revelaron a DyN que tanto la provincia de Córdoba cuanto el Gobierno nacional, representado por el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, y el titular de la ANSES, Diego Bossio, se mantuvieron en sus posturas y no hubo puntos de acercamiento posibles.
El clima de la discusión se tensó hasta el extremo, entre las segundas líneas de los representantes de ambas partes, ante la mirada de los jueces de la Corte Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Raúl Zaffaroni, Carmen Argibay y el cordobés Juan Carlos Maqueda.
Cuando la sala de audiencias de la Corte estaba dispuesta para recibir a tres disertantes (Lorenzetti, De la Sota y uno de los dos funcionarios del gobierno nacional), una vocera de prensa del titular del Palacio de Hacienda anunció que Lorenzino no acudiría y, en cambio, ofrecería por la tarde una rueda de prensa en Economía.
Lorenzetti ni siquiera se asomó por la sala de audiencias, de modo tal que el reducto en el que habitualmente prestan juramento los nuevos jueces de la Corte fue el escenario para que De la Sota le enviara un "mensaje" a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El gobernador cordobés afirmó que el Gobierno Nacional insistió con el pedido para que baje las jubilaciones en su provincia y abandonen "el 82 por ciento sobre el salario bruto". "Han vuelto a insistir a que le bajemos las jubilaciones a los cordobés, a que abandonemos el 82 por ciento sobre el salario bruto y no lo vamos a hacer", destacó De La Sota, y ante una pregunta específica deslizó que esa propuesta había sido formulada por "los dos funcionarios" del gobierno nacional.
De la Sota acusó a la Casa Rosada de "borrar con el codo lo que firmó con la mano", en relación al acuerdo previsional firmado con la Provincia.
Por su parte, Lorenzino desmintió que la Nación haya propuesto "un ajuste o recortes en los derechos previsionales de los jubilados cordobeses", como denunció el gobernador. Según el ministro, "la provincia de Córdoba tenía el derecho de tener su propio sistema previsional", al tiempo que aclaró que "sólo un 16 por ciento de los jubilados cordobeses cobran del sistema provincial".
En una conferencia de prensa tras la audiencia que se realizó en la Corte Suprema de Justicia, el ministro especuló que "el Gobernador de Córdoba busca tener presencia en los medios de comunicación y que tiene una concepción del federalismo de derechos".