La Fiscalía pedirá excavaciones en el Pozo de Arana
Quieren
determinar si hay restos óseos enterrados en el lugar. Varios testigos que
prestaron declaración en el proceso contra Christian Von Wernich dijeron que allí
se quemaban cadáveres, junto a cubiertas de vehículos.
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Cedoc
La Fiscalía solicitará que se realicen excavaciones en un destacamento policial de La Plata donde funcionó un centro clandestino de detención durante la última dictadura y en el cual, según varios testigos, se habrían quemado cadáveres junto a cubiertas de vehículos.
Así lo informó hoy el fiscal federal Carlos Dulau Dumm, tras una inspección ocular realizada al lugar donde estuvo el Pozo de Arana, en 640 y 131 de la capital provincial, en el marco del juicio al ex capellán policial Christian Von Wernich, acusado de asesinatos, torturas y secuestros.
El pedido obedece a que, según diversos testimonios, en ese lugar, donde hay un depósito de autos, se habrían enterrado y quemado cadáveres de víctimas de la dictadura. La Fiscalía busca determinar si en el lugar hay enterrados restos óseos.
La inspección de hoy estuvo encabezada por los jueces del Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, que juzgan al ex capellán de la Policía Bonaerense. También participaron sobrevivientes de la dictadura que dijeron haber visto al cura en esa prisión ilegal.
Eduardo Kirilovsky, Liliana Zambano y José Llantada se retiraron sin realizar declaraciones pero trascendió que habían reconocido el lugar como el sitio donde permanecieron cautivos y donde habrían visto a Von Wernich.
Horacio Isaurralde, integrante del TOF, explicó a la prensa que durante la inspección "volvimos a escuchar el relato de los testigos y recorrimos las instalaciones que a lo largo de treinta años fueron modificadas".
En tanto, el fiscal Dulau Dumm resaltó la importancia del procedimiento "habida cuenta de que en la zona de Arana funcionaron tres centros clandestinos de detención" en los que, según testigos, se torturaba durante los interrogatorios.
Dulau Dumm adelantó que solicitará el desalojo de la parte posterior de este predio, donde habría funcionado el Pozo de Arana, para permitir que equipos de médicos forenses realicen excavaciones para buscar restos humanos.
En el juicio al ex Director de Investigaciones de la Policía Bonaerense Miguel Etchecolatz, condenado a perpetua por genocidio, varios testigos aseguraron que en ese lugar además se quemaban cadáveres junto a cubiertas de autos.
