POLITICA

La foto de Scioli en Clarín reavivó la crisis de sucesión K

Desde Capitanich hasta D’Elía salieron a marcarle los límites al único precandidato de peso que hoy tiene el oficialismo. “Es el candidato de Clarín en el FpV”, le espetaron.

Datos de la última encuesta exclusiva de Perfil.
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El kirchnerismo aprieta, pero no ahorca. Quizás, porque se trata del cuello del único dirigente de su espacio con intención de voto para derrotar a la oposición y garantizar cuatro años más de gobierno. Pero la foto de Daniel Scioli en el Espacio Clarín de Mar del Plata provocó la furia de distintos referentes, incluso de allegados a la Presidenta, que salieron a marcarle límites.

Es que la fotografía del dirigente con una sonrisa en el rostro, en plena broma con la imitadora de Cristina Fernández de Kirchner, la humorista Fátima Florez, llegó en el peor momento: justo cuando el kirchnerismo quiere reavivar el enfrentamiento con el Grupo Clarín de cara al año electoral, a partir de la nueva cautelar que hoy favorece al multimedios en el litigio por su adecuación a la Ley de Medios.

El primero en salir a cruzar al gobernador luego de que la imagen saliera en la portada del matutino fue el ministro del Interior y Transporte Florencio Randazzo, que competirá con Scioli en la interna K. “Está claro que, como venimos señalando con mucho respeto, el poder económico y mediático tiene candidatos en todos los partidos políticos, y dentro de la primaria del Frente para la Victoria, ese es Daniel Scioli. Una de las tantas pruebas de ello es la tapa de Clarín”, lanzó.

Más aún, el ministro trató de apaciguar la crisis de sucesión que hoy enfrenta el cristinismo duro y pidió: “Que se queden tranquilos aquellos que apoyan a Cristina, porque Scioli no es la expresión genuina de este proyecto político nacional y popular”. En ese mismo sentido se había pronunciado el año pasado Carta Abierta, cuando afirmó que el gobernador “no representa” los intereses del proyecto K.

Sin embargo, las declaraciones que más sorprendieron llegaron en la mañana del lunes, cuando el jefe de Gabinete Jorge Capitanich, de permanente diálogo con la Presidenta, salió a marcarle límites a Scioli. "O están con los grupos económicos y mediáticos concentrados que conspiran contra los intereses del pueblo argentino o están con este proyecto político que ha transformado la Argentina", fustigó.

Capitanich se refirió a la polémica y sostuvo que "cada uno es responsable de sus propios actos. En la Argentina hay una contradicción muy clara y evidente, democracia versus corporaciones, y Clarín es una de ellas. El Grupo Clarín es claro enemigo del pueblo argentino, de sus conquistas y quiere un candidato que sea su gerente corporativo", agregó.

Otro que salió a fustigarlo fue el gobernador de Entre Ríos Sergio Uribarri al afirmar que el bonaerense representa el "riesgo de volver para atrás" y aseguró que "no da garantías de cuidar los logros" obtenidos durante el kirchnerismo y "mucho menos de profundizarlos". 

Urribarri lamentó que Scioli "quiere agradar a todo el mundo" y le advirtió que "en tiempos de crisis global los dirigentes políticos debemos tener definiciones claras". Consultado sobre la actitud del bonaerense, el entrerriano dijo que se trató de "un episodio más de los tantos que Daniel nos tiene acostumbrados de ir a esos lugares, abrazarse con gente que ha criticado duramente a nuestra presidenta, sonreír y prestarse a las notas".

Julián Dominguez, presidente de la Cámara de Diputados y anotado como precandidato presidencial K, tampoco dejó pasar la oportunidad para criticar a su máximo competidor. “No es de buen peronista mostrarse con quien se burla de la Presidenta de todos los Argentinos y de nuestro gobierno”, escribió en Twitter, al compartir la foto de Sicoli con Fátima Florez. “En nombre del diálogo no se puede estar bien con Dios y con el diablo”, fulminó.

No obstante, como suele pasar en el kirchnerismo, el más contundente en expresar la visión cristinista fue el piquetero Luis D’Elía. “Es un cagador, el candidato que se vende así mismo (sic) como gran gestionador y no muestra cual es su ideología y sus principios”, lanzó, junto a una foto de Scioli en el Espacio Clarín. “Sin palabras, ¿se puede tener como jefe político a Clarín y a Cristina al mismo tiempo?”, escribió.

Por su parte, Scioli explicó que el kirchnerismo "se nutre de una diversidad que necesita de la unidad de todos los sectores para consolidar los logros”. Y se defendió: "Estamos en un momento de campaña (electoral), entonces, uno dice una cosa, otro dice otra. Yo no me quiero apartar ni un milímetro de lo que a la gente le interesa y la pelea entre los dirigentes no le mejora la seguridad, ni la educación, ni la salud. La gente quiere ver acciones concretas que traigan resultados", replicó Scioli en diálogo con radio La Red.

El gobernador aseguró que asistió al Espacio Clarín porque "fue una responsabilidad que hace" a su "cargo institucional, que tiene que ver con agradecer a todos los elencos y a sus producciones". "Y, particularmente, desde lo humano, la posibilidad de darle una abrazo a mi amigo de tanto tiempo (el actor Carlos) 'Carlín' Calvo", argumentó.