La imagen del Gobierno nacional, que tocó un techo tras las elecciones legislativas de 2017, no detiene la caída que comenzó con la reforma previsional de diciembre. La aprobación de la gestión de Cambiemos, y del presidente Mauricio Macri atraviesa sus peores meses. Para colmo, las expectativas de que la economía mejore en el próximo año, uno de los motores de la esperanza que impulsaba al oficialismo, sigue en picada gracias a la devaluación y la inflación de los últimos meses. Así se desprende de la encuesta del Monitor del Humor Social elaborado por D'Alessio IROL / Berensztein, a la que accedió Perfil este lunes.
En primer lugar, existe un pico de pesimismo respecto de la visión sobre el presente y el futuro de la economía nacional, a partir de los efectos que la corrida cambiaria. Respecto de la actualidad económica, 78% encuestados ya observa que el escenario empeoró en los últimos 12 meses, mientras que un 57% cree dentro de un año habrá retrocedido más.
A su vez, solo un 14% de los entrevistados se mostró seguro de que el préstamo del Fondo Monetario Internacional servirá para evitar una crisis y apenas un 26% lo estima como probable. Un 55% estima que la economía crecerá menos y un 72%, que habrá más inflación
El estudio fue realizado durante junio, incluyó a 1477 adultos en todo el país, y exhibe una pérdida de confianza en la gestión del Gobierno y de la imagen de los principales dirigentes del oficialismo como consecuencia política.
En el estudio, también como consecuencia política, se observa una pérdida de confianza en la gestión del Gobierno y de la imagen de los principales dirigentes del oficialismo, que se contrapone con el crecimiento de un dirigente opositor con experiencia en el manejo de crisis, como es el caso del ex ministro de Economía Roberto Lavagna, quien encabeza la lista de líderes políticos con un 55% de imagen positiva, que incluye la aprobación del 48% de quienes votaron por Mauricio Macri en 2015 y del 61% de los que lo hicieron por Daniel Scioli, en aquella ocasión.
Imágenes en picada. La imagen de Macri continúa con la brecha entre apreciaciones negativas y positivas que comenzó en diciembre pasado. La imagen favorable cayó a 41%, el valor más bajo de su gestión presidencial, y la negativa trepó a 54%, también un récord desde que asumió.
Como contrapartida, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner parece haber comenzado a cerrar esa misma brecha: su imagen positiva creció al 30%, pero la negativa se mantiene en 64%. La diferencia entre una y otra se achica cada vez que el Gobierno de Cambiemos tropieza.
Para Elisa Carrió, otra figura polarizante, la imagen positiva cayó a 44% y la negativa subió a 51%, la primera vez que se registra una diferencia en contra en los últimos dos años. En el caso de María Eugenia Vidal, mantiene la valoración positiva (53%) sobre la negativa (42%).