Tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia que decretó la libertad sindical, Patricia Bullrich revivió la vieja pelea que la llevó a ganar el apodo de La Piba durante el gobierno del ex presidente Fernando De la Rúa, en el que se enfrentó como ministra de Trabajo a los Gordos, como se conocía a los representantes del poder sindical. Todas esas viejas diferencias reflotaron hoy.
A través de un comunicado, la diputada de la Coalición Cívica celebró la decisión y manifestó que "la Corte Suprema de Justicia ha puesto las cosas en su lugar y ha abierto un camino para que el principio de la libertad sindical sea un derecho concreto y no una palabra escrita y no practicada de nuestra constitución nacional que consagra las garantías existentes en la misma y que no pueden ser acotados o restringidos por la legislación".
"Este modelo ha permitido construir un sindicalismo con escasa rotación y alternancia, con bajísimos niveles de participación enmarcados en el modelo del sindicato único por rama de actividad, conocido como unicato y de monopolio de la representación impidiendo de esta forma, la libertad de opción, de elección y de asociación y violando el artículo 14 de nuestra Constitución", afirmó Bullrich.