El acto del 25 de mayo en Rosario marcó un hito en el conflicto que enfrenta al campo y al Gobierno desde hace 75 días, pero también hubo momentos disparatados y detalles de color que merecen atención.
Prensa rosa. Al acreditarse, los organizadores les daban a los periodistas una pulserita para que pudieran salir y entrar de la zona de prensa sin inconvenientes. “Muchachos no es por nada el color, no piensen mal”, lanzó y se rió uno de los coordinadores al acreditar a Perfil.com. ¿De qué color era los brazaletes? ¡Rosa! A las chicas les quedaban bien y a los chicos… les quedaban.
Un médico a la derecha, otro acá y allá. Juntar 300 mil personas en un lugar trae problemas. Y a pesar de que el acto fue tranquilo, el calor y la multitud desmayaron a varios. El pico de urgencias se dio cuando Luciano Miguens, de la Sociedad Rural, leía su discurso; él veía que le hacían gestos, saludaba pero su oído no captaba el mensaje “¡¡¡Doctor!!!!”.
Miguens y Biolcatti, para la tribuna. Fueron los únicos dirigentes jerárquicos que pasaron a saludar a la gente que estaba desde temprano pegada a la vallas. Abrazos, fotos y sonrisas a rolete. Francisco de Narváez también hizo lo mismo y fue la delicia de las señoras del campo que elogiaban el buen estado físico del colorado bonaerense.Están lloviendo papelitos. Mientras hablaban los presidentes de las entidades rurales, explotó una bomba en el cielo que derivó en una precipitación de papelitos. ¿Qué decían? Difícil saberlo, cayeron lejísimo. ¿Error de coordenadas o el viento es oficialista?
¿Lilita fue? “Ahí viene Carrió”, lanzó un periodista y todos comenzaron a mirar por dónde. Pescado podrido: la líder de la Coalición Cívica ni apareció cerca del escenario. Estaba en el Monumento a la Bandera firmando autógrafos .
Blumberg y Castells, realidades opuestas. El “ingeniero” Juan Carlos llegó discreto al acto y casi ni dio declaraciones, estuvo guardado y no entró con todo el brillo mediático de los otros políticos. Diferente fue lo de Castells, quien saltó la barda, se mezcló con la prensa y dio entrevistas a más no poder. Al final, terminó como una estrella rural, sacándose fotos con todos.
Ruralista gritón confunde al presidente. Hablaba Eduardo Buzzi de Federación Agraria y todos hacían silencio… menos uno. Chacarero él, dictaba a los gritos puntos críticos para que nombre el titular de la FAA. “Las economías regionales”, primero, “la justicia”, después y así repetía, y molestamente. “¿Y éste qué se tomó?”, lanzó un fotógrafo al pie del escenario. Quizás por eso Buzzi tuvo el acto fallido que tuvo: dijo que De la Rúa, tras su renuncia, se fue de la Rosada ¡en colectivo!
Notero ofendido. A Clemente Cancela, de CQC, le encanta encarar con el micrófono y la cámara. Ahora, cuando otros le hacen notas a él, no es tan simpático. Su estado de enojo se agrava si, como ocurrió hoy, el movilero que lo encara intenta hacerse el gracioso y dice: "¡Cómo andás Gonzalito!".
(*) Redactor de Perfil.com