En un intento presuntamente orquestado por su defensa, el detenido José Francisco López intenta evitar ser llevado desde la alcaidía hasta el tercer piso de los tribunales federales de Comodoro Py en Retiro. Recurre a gritos y cabezazos contra la pared.
Además, según consignaron trascendidos periodísticos, López habría solicitado en las últimas horas que le lleven “cocaína” para consumir.
López busca demostrar un alto grado de nerviosismo y hasta de desequilibrio psicológico con el fin de dilatar su cita con el juez federal Daniel Rafecas, quien lo investiga por presunto enriquecimiento ilícito.
Este miércoles su excéntrica abogada Fernanda Herrera alegó ante la Justicia bonaerense que su defendido padecía “alucinaciones”. Y que “no entendía” quiénes le hablaban ni cuando “le preguntaban por su familia”. "López no está bien de salud y no puede declarar en estas condiciones. Tiene alucinaciones. Está con un ataque de pánico y a los gritos", aseguró ayer la letrada en la puerta de la Fiscalía de General Rodríguez.
Sin embargo, los peritos que ayer lo revisaron rechazaron el argumento propuesto por Herrera y manifestaron que se encuentra "en perfectas condiciones psíquicas”. Sólo diagnosticaron un cuadro de "estrés nervioso” por lo vivido en las últimas horas.
El ex funcionario fue apresado en el monasterio de clausura Nuestra Señora del Rosario de Fátima con un arma y casi 9 millones de dólares.