La paritaria nacional docente, clave para las negociaciones con el resto de los sindicatos y fundamental para el futuro de la economía, comenzó con un fuerte rechazo por parte de los gremios, puso en riesgo el inicio de las clases previsto para el 5 de marzo y dejó abierta la posibilidad de que el Gobierno cierre las negociaciones por decreto.
Quien se encargó de anunciar el fracaso de la primera reunión fue el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, al adelantar el rechazo a la propuesta del 35% por parte de los sindicatos.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, y su par de Educación, Alberto Sileoni, fueron las voces de la reunión que se celebró ayer con los sindicatos y en la cual se les ofreció el 22% de aumento –12% en marzo, 5% en agosto y otro 5% en noviembre– sumado a $ 2 mil en junio y diciembre con una cláusula por presentismo. De esa forma, el Gobierno sorprendió al atar el aumento a la asistencia a clase. Así, el aumento ofrecido por el Gobierno llevaría el salario inicial a $ 4.333 en diciembre. Según Capitanich, se trata del 26,8% de aumento si se toman las sumas fijas no remunerativas.
De todas formas, la oferta quedó por debajo de los $ 4.860 que pidió Ctera, el principal sindicato de docentes. En este contexto, la posición planteada ante los representantes del Frente Nacional Docente, que conforman cuatro gremios de la CGT oficial y Ctera, de la CTA kirchnerista, se explica porque el Gobierno considera que la inflación de este año no será mayor que la de 2013 y, por ello, el porcentaje de incremento no tendría por qué ser superior. Esto les transmitió ayer Kicillof ante la mirada de los sindicalistas que se sorprendieron, de forma negativa, con la oferta ya que la semana pasada había sido del 23,5% en tres tramos.
Ahora habrá un compás de espera hasta el lunes, cuando vuelvan a reunirse. Desde el kirchnerismo ya deslizaron que no superará el 26%, incluso a 18 meses, y que ya están al tanto de que, seguramente, las negociaciones fracasarán. De todas formas, es vital para el Gobierno que el porcentaje, ya sea por decreto o no, fije un número que no afecte el resto de las paritarias. Además, Kicillof les expresó a los gremios que se están basando en un cálculo de inflación distinto al que maneja la Casa Rosada.
El encuentro duró dos horas en el primer piso del Palacio Pizzurno, a metros del despacho de Sileoni. Café, mate cocido, té y agua eran los únicos testigos del encuentro del que participaron la Unión de Docentes Argentinos (UDA), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) y de la Confederación de Educadores Argentinos (CEA), todos enrolados en la CGT. También estuvieron Stella Maldonado de Ctera, junto a los referentes porteños (Eduardo López de UTE) y Roberto Baradel, por la provincia de Buenos Aires. Al salir de la reunión, Maldonado afirmó que “la propuesta no era posible de aceptar”; mientras que Sergio Romero (UDA) dijo que lo ofrecido está “muy lejos de la realidad”. “Es una propuesta que ni el propio Gobierno se la cree y van a tener que trabajar mucho el fin de semana”, disparó.
Si bien el encuentro fue amable, las fuentes coinciden en que hubo un tono muy distante hasta que los funcionarios nacionales pidieron pasar a un cuarto intermedio. Del lado del Gobierno también estaban dos hombres clave: el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, y el secretario de Educación, Jaime Perczyk, mano derecha de Sileoni.
Capitanich informó que el salario inicial desde el mes de diciembre de 2003 tuvo un incremento de 800%. “Creemos que nos permitirá arribar a un acuerdo la semana que viene”, dijo. El Gobierno ya le había adelantado el jueves a Caló que pediría un cuarto intermedio y solicitó que no rechacen la oferta sobre la mesa.
Ayer, los dirigentes se encontraron con que todas las señales de buena voluntad se tiraron por la borda. La paritaria docente federal fija el salario mínimo de los maestros. Ningún docente puede ganar menos que lo acordado en ningún lugar del país. Las condiciones están dadas para que haya un paro de tres días (el 5, 6 y 7 de marzo) y las clases no comiencen. Mientras tanto, hoy por la mañana se reunirán los referentes del Frente nacional Docente para estudiar los pasos a seguir. Los gremios aceptaron ir a cuarto intermedio pero regresaron a sus sedes a discutir las medidas de fuerza que se pondrán en marcha si el lunes no llegan a un arreglo