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Los policías de Salta y La Pampa que reclamaban mejoras salariales llegaron ayer a un acuerdo con los gobiernos provinciales, y tras diez días de tensión con incidentes y saqueos se levantaron las protestas de las fuerzas de seguridad.
En Salta, los agentes levantaron la medida de fuerza después de firmar un acta acuerdo con el gobierno de Juan Manuel Urtubey, que incluyó un incremento salarial de casi el 50 por ciento y el compromiso de no sancionar a los policías que participaron de las manifestaciones.
El jefe de la Policía salteña, comisario Marcelo Lami, confirmó que los agentes retomarán sus funciones luego de una reunión con el representante legal de los autoconvocados, Federico López, y tres policías en actividad.
“Hubo un clima de tres días de tensión, con ausentismo por parte de los bicipolicías, banda de música y canes. En su mayoría eran efectivos de corta edad y poca experiencia que no entendían qué pasaría si paraba la Policía”, agregó.
En ese sentido, Lami subrayó que de los 9.300 efectivos de la fuerza de seguridad “sólo 300 participaron de las marchas y protestas”.
La Pampa. Los policías pampeanos autoacuartelados llegaron ayer a un acuerdo con el gobierno provincial para percibir un aumento salarial que fija el haber básico del agente inicial en 6.000 pesos.
El gobernador kirchnerista Oscar Jorge no aceptó, sin embargo, el reclamo de los uniformados de remover a la cúpula de la Policía pampeana.
La administración provincial propuso a los policías una suba en la “dedicación exclusiva” y pasar de los 500 pesos actuales que percibe un agente raso a cerca de 2.000 pesos.
En tanto, el gobernador de Tucumán, José Alperovich, afirmó ayer que “de a poco vamos recuperando la normalidad” en la provincia luego de la protesta policial y los saqueos en los primeros días de la semana, que provocaron cinco muertos.
“Estamos trabajando para seguir llevando seguridad a la gente, para que retorne la calma. Realizaremos un dispositivo especial para contar con más efectivos durante las fiestas del 24 y del 31 de diciembre”, aseguró en rueda prensa.
Por otra parte, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, confirmó un “reconocimiento económico y financiero” para los efectivos de las fuerzas nacionales que intervinieron para controlar los saqueos.
Conflicto abierto. En San Luis, un grupo de agentes penitenciarios comenzaron una huelga “por tiempo indeterminado” para reclamar mejoras salariales, frente a la cárcel ubicada en las afueras de la capital provincial.
El director del Servicio Penitenciario puntano, Inocencio Carpio, aseguró que pese a la protesta está garantizada la seguridad en el interior del penal. En términos generales, los conflictos provinciales comenzaron a menguar tras los aumentos anunciados y luego del pico de violencia de la semana pasada