El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, afirmó que la inflación que se registra en el país es producto de una "mala gestión", y advirtió que, en caso de acceder a la presidencia en el 2015, es un problema que "no tendrá".
"En nuestro gobierno no tendremos ese problema porque generaremos confianza y las inversiones vienen solas", señaló el referente del PRO, quien puso como ejemplo la gestión en la ciudad de Buenos Aires, donde "se instalan cada vez más empresas nacionales y extranjeras que crean miles de puestos de trabajo porque somos serios y damos previsibilidad".
Pese a sus promesas respecto del gran flagelo que sacude los cimientos de la economía nacional, Macri soslayó los fuertes aumentos que aplicó en la tarifa del subte, en el ABL, en peajes y en las patentes de los autos.
Macri agregó que "nadie sabe lo que está pasando con la Presidenta, Cristina Kirchner", al tiempo que advirtió que el 2014 "será un año particularmente difícil para la Argentina por la ausencia del estado en resolver las dificultades en temas básicos".
Por último, recordó que su partido "se ha diferenciado siempre de las decisiones apuradas y equivocadas que tomó el oficialismo y que otras fuerzas apoyaron, como cuando se votó por Aerolíneas, la expropiación de YPF o la Ley de Medios".