Los incidentes de ayer en la estación Castelar, partido de Morón, detonaron el interés de varios dirigentes preocupados por la situación caótica del transporte público argentino. En ese orden, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, señaló que existe un "severo problema de transporte".
"Los franceses me dijeron hace unos meses que aunque les ofrecieran una fortuna por operar los trenes argentinos metropolitanos -y los subtes-, no se animarían, porque están fuera de todos los parámetros de seguridad y calidad", confesó Macri.
El líder de PRO se refirió, además, al pago de la deuda del Estado argentino con el Club de París que anunció la presidenta Cristina Fernández. "Entre pagar y no pagar, considero positivo lo que se hizo con el Club de París. Pero hubiera sido mejor refinanciar a largo plazo, a una tasa del 3 ó 4% y tener esa plata disponible para arreglar hospitales, los trenes metropolitanos o para hacer más escuelas", remarcó.