La jornada de ayer en los tribunales de Retiro todavía duraba el impacto por los trascendidos de la declaración del contador de la ex familia presidencial, Víctor Manzanares, quien en su búsqueda de convertirse oficialmente en arrepentido apuntó al banquero Sebastián Eskenazi. Manzanares ya declaró más de 20 horas en el expediente e ingresó en el Programa de Protección de Testigos e Imputados, pero aún no pudo lograr que el acuerdo al que llegó con el fiscal Carlos Stornelli sea homologado por el juez Claudio Bonadio.
De acuerdo a la información dada a conocer por La Nación, Manzanares –detenido desde julio de 2017, en el marco del caso Los Sauces– sostuvo que fue Eskenazi quien recibió el dinero negro que manejaba el fallecido ex secretario de Néstor Kirchner, Daniel Muñoz. Los Eskenazi son propietarios del Banco Santa Cruz y tras conocerse la declaración de Manzanares, desde el Grupo Petersen, propiedad de la familia, desmintieron los dichos del contador través de un comunicado.
El apellido ya había sonado en otras oportunidades en la causa y despertó varias suspicacias. Inicialmente había sido mencionado por el financista Ernesto Clarens, para luego desdecirse. También se difundió una foto del juez Bonadio comiendo con dos de los integrantes de esa familia. El hecho motivó que el propio magistrado se autodenunciara para que se lo investigara tanto por su relación con los Eskenazi como por los dichos del CEO de Perfil Netwok, Jorge Fontevecchia, en La Nación+.
La siguiente mención de los Eskenazi, que supieron tener una activa participación durante los gobiernos kirchneristas, se dio en el fallo de la Sala I de la Cámara Federal de Apelaciones, que a fines de diciembre confirmó el procesamiento con prisión de CFK, entre varias otras definiciones sobre el primer tramo de la causa. Allí los camaristas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi encomendaron a Bonadio investigar a los grupos de esa familia.
“Cabe señalar, al respecto, que el imputado arrepentido se refirió a diversas firmas, algunas de ellas mencionadas también por (el ex dueño de Esuco, Carlos) Wagner, cuyos representantes aún no han sido convocados, tales como Perales Aguiar SA, Cartellone SA, entre otras; incluidas ciertas empresas cuyos referentes habrían tenido vínculos con algunos de los protagonistas de esta trama –según resulta de público conocimiento–, tales como Juan Carlos Relats SA o el grupo Eskenazi; encomendándose –en consecuencia– al magistrado instructor, que no dude en profundizar en esas líneas de investigación”.n