"Macri no tiene cintura y Daniel está fuera de tiempo y de distancia, no están para jugar en primera", sentenció el vicegobernador Gabriel Mariotto minutos después de que finalizara el partido de fúbol entre su compañero de fórmula Daniel Scioli y el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
Una vez más recurriendo al tono irónico, Mariotto le envió un claro mensaje al gobernador, reprobando públicamente la actividad en la que participó mientras la presidenta Cristina Fernández de Kirchner estaba internada.
De esta manera, las diferencias entre Scioli y Mariotto que se hicieron públicas tras los incidentes en la Legislatura entre la policía bonaerense y La Cámpora, se acentúan. "No tiene ninguna explicación válida el mostrarse con Macri", reconoce el vicegobernador a su entorno.
Para marcar aún más las diferencias, Mariotto se reunió con el vicepresidente a cargo del Ejecutivo, Amado Boudou. Mientras Scioli encabezaba un acto con deportistas, él se mostró concentrado en la gestión y como interlocutor del Gobierno nacional.
El encuentro con Boudou fue, en lo formal, para conversar sobre la grave sequía que afecta a la provincia de Buenos Aires. Según la información oficial, Boudou recibió en su despacho a Mariotto con el fin de tener un panorama del grado de impacto que está teniendo en la provincia de Buenos Aires la falta de lluvias.
El análisis tuvo como base un informe del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) que anticipó precipitaciones para la próxima semana.
Mientras Scioli recorre las distintas playas, Mariotto continuará con su agenda propia. "Las actividades están en toda la provincia, no en la costa, y cuando vaya lo hará con actividades de trabajo puntuales, no para pasear con Scioli", explicó a PERFIL un hombre de su confianza. Por ello, Mariotto ya tiene en agenda a Necochea, Mar del Plata y Bahía Blanca. Pese a que en Mar del Plata está el búnker de Scioli durante el verano, Mariotto sólo participará de una reunión con representantes del puerto y permanecerá lejos del color naranja.
Por su parte, varios intendentes del Conurbano bonaerense se mostraron molestos con Scioli. "Cuando nos invitó nos dijo que era un partido entre Boca y Villa La Ñata, no nos dijo nada de Macri", explica un jefe comunal. "Después Daniel quiere que lo defendamos, es una clara mojada de oreja lo que le hizo a la Presidenta", sostuvo un intendente kirchnerista de la tercera sección electoral.
(*) Publicado en la edición impresa de Diario PERFIL del sábado
