La Sala IV de la Cámara Nacional de Casación Penal apartó este martes a la jueza Sabrina Namer del tribunal que juzgará el presunto encubrimiento del atentado terrorista a la AMIA, a través del Pacto de Entendimiento con Irán, en el que está imputada la ex presidenta, Cristina Fernández de Kirchner. El apartamiento de Namer había sido pedido por una de las querellas que representa a los familiares de 2 de las 85 víctimas del mayor atentado terrorista de la historia local, ocurrido el 18 de julio de 1994. Los camaristas Juan Carlos Gemignani y Gustavo Hornos, consideraron que se verificó el temor de parcialidad que alegaba la querella, porque Namer integró la UFI AMIA, tras la muerte del fiscal Alberto Nisman, en tanto que el tercer miembro del tribunal, Mariano Borinsky, votó en disidencia.
Los magistrados también ordenaron que se complete con la mayor celeridad posible el nuevo tribunal, que juzgará el caso en el que junto a CFK, entre otros, están procesados Carlos Zannini, Héctor Timerman, Oscar Parrilli y Luis D Elía. Todos ellos fueron procesados en diciembre pasado por el juez Claudio Bonadio, quien acumuló en su despacho los expedientes por Traición a la Patria y el presunto encubrimiento del atentado a la AMIA a través del Pacto de Entendimiento con Irán, que fue denunciado por Nisman en enero de 2015. La presentación del fiscal fue realizada cuatro días antes de aparecer muerto con un balazo en la cabeza. Todos los involucrados enfrentan los delitos de encubrimiento agravado, estorbo de un acto funcional y abuso de autoridad.
Este martes, Hornos y Gemigniani votaron en sintonía por el apartamiento de Namer, en tanto que Borinsky apoyó la continuidad de la magistrada en su cargo. De acuerdo a información difundida por el Centro de Información Judicial (CIJ), Hornos analizó los antecedentes profesionales de Namer en la UFI AMIA y evaluó la posibilidad de que en ese tiempo haya adquirido información producida por esa Unidad especial, junto con el contacto que en ese rol tuvo con varias de las personas que ahora están como parte de este proceso. Así consideró que “…es en un caso como este que, en materia de imparcialidad, las apariencias -en el sentido que al término le da el TEDH- juegan un rol fundamental en el sentido de que el juez no sólo debe ser imparcial, sino también parecerlo”.
Borinsky, presidente del tribunal, por su parte, consideró que no correspondía apartar a la magistada, ya que no existe resolución jurisdiccional que de cuenta de conexidad entre la causa juzgar y en las que Namer actuó como fiscal. Al tiempo que agregó que la querella que pidió su corrimiento no logró demostrar cuáles eran los motivos objetivos que surgen del expediente que puedan afectar la garantía de imparcialidad.
Namer es una mujer de carrera judicial, que llegó al TOF 8, el último en crearse, en 2016. Antes pasó por la UFI AMIA, donde en febrero de 2015 se hizo cargo, junto a otros dos fiscales, de la unidad especializada que hasta un mes antes había sido dirigida por Nisman. Su currículum también incluye su paso por el Tribunal Oral en lo Criminal 20 y la Oficina Anticorrupción (OA), entre otros cargos. Formada en la Universidad de Buenos Aires, tiene un posgrado en Derecho Penal.
En tanto que en el TOF 8, que juzgará la causa contra CFK, deberá sortearse un nuevo magistrado. Tras el apartamiento de Namer sólo quedan Gabriela López Iñíguez y José Antonio Michilini, miembro del TOF 1, quien fue sorteado en reemplazo de Nicolás Toselli, quien se excusó por ser yerno del ex embajador en Siria, Roberto Ahuad, quien fue testigo en la causa.
