La investigación de las coimas pagadas por Siemens en la Argentina, un tema que avanza en la justicia alemana, tiene al ex presidente Carlos Menem en el ojo del huracán. Por eso el ex presidente contestó esta tarde a las acusaciones con un comunicado, en el que senaló: "hace más de una década que soporto que mi nombre sea impunemente traído, llevado y manchado con infundios de distinta naturaleza. Durante todo este largo período he estado sometido al escrutinio de la Justicia y al manoseo de gobiernos y fuerzas hostiles; he colaborado con las investigaciones de los Tribunales, aportando toda la información que me fue solicitada y ofreciendo espontáneamente piezas informativas que no me habían sido pedidas. Mi vida y mi patrimonio se han convertido en una materia transparente. Y sin embargo, aunque no hay fallo alguno de la Justicia en mi contra, el maltrato no cesa".
Agregó Menem que "ahora se difunden nuevas versiones falsas y calumniosas sobre mi persona, basadas, al parecer, en dichos de una persona sospechada o imputada por la Justicia alemana. No se trata siquiera de un dictamen de jueces, sino de la palabra atribuida a un sospechoso de delitos en Alemania".
Finalmente, destacó la nota del ex Presidente que "debo confesar que estoy harto de que mi nombre y mi honor sufran el daño producido por la palabra irresponsable y la imputación al voleo. En un estado de derecho nadie debería estar expuesto a la agresión constante a su dignidad, basada en prejuicios, sospechas o rumores. He hecho lo que muchos otros han eludido: me he sometido a la acción de la Justicia. Y lo seguiré haciendo. En nombre de esa conducta que otros –algunos en el sector público, otros en el privado- eluden, reclamo que se me trate con ponderación y ecuanimidad. No estoy dispuesto a que mi honra y la de mi familia sean tiradas a los perros".