El legislador porteño Gabriel Solano acusó a la central obrera de haberle pedido al presidente Alberto Fernández que endurezca su posición contra el reclamo de SUTNA.
Gabriel Solana |
Pablo Cuarterolo
“Pocas veces se vio que en medio de una lucha la (Confederación General del Trabajo) CGT se pone tan claramente del lado de la patronal”. La frase pertenece a Gabriel Solano, legislador porteño por el Partido Obrero, y hace referencia a la reunión que este lunes mantuvieron los gremialistas con el presidente Alberto Fernández en la residencia de Olivos.
El encuentro no sólo despertó el enojo de la izquierda sino dejó a la propia central obrera al borde del quiebre ya que Pablo Moyano, uno de los integrante del triunvirato que la preside –los otros son Héctor Daer y Carlos Acuña- no fue convocado.
Frente a la escalada de conflictos que sacuden al país, Solano habló de tres que tomaron la agenda pública en los últimos días: la situación en las fábricas de neumáticos, las tomas en las escuelas y la reunión de la CGT.
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Sobre el último tema, el legislador no dudó en calificar a la dirigencia cegetista como “un grupo de traidores” y que debería haber ido a reclamar y “darle a los trabajadores (de los neumáticos) lo que ellos piden”.
Solano participó de un mini reportaje tras la charla que ofreció en la Escuela Perfil con los alumnos de la carrera de periodismo. En ese marco, y sobre las tomas en los colegios que se suceden desde el último viernes, sostuvo que va a estar “a morir con los pibes y las pibas, siempre”. En cuanto a la situación en las fábricas de neumáticos, el edil afirmó que “es un ejemplo para todos los trabajadores” y añadió que “es la forma de luchar realmente para conseguir lo que los trabajadores se merecen”.
