Alejandro Vilca hizo historia al convertirse en el primer diputado nacional de Jujuy por el Frente de Izquierda. De origen colla y trabajador, el flamante legislador busca reivindicar a un sector social precarizado en una provincia en la que asegura que predominan los intereses de los poderosos (garantizados por los políticos locales) y el clientelismo por sobre las necesidades de la gente.
"Mis inicios en política fueron muy a contracorriente. En Jujuy la política siempre estuvo remitida a las familias tradicionales, con apellidos ilustres, pero no a los trabajadores", opinó Alejandro Vilca en diálogo con PERFIL a pocos días de conocerse la sorpresa de que un dirigente indígena y de origen humilde ocupará una banca en el Congreso Nacional en el bloque del FIT-Unidad a partir del próximo 10 de diciembre.
El Frente de Izquierda logró cuatro bancas en la Cámara de diputados
Vilca explicó que su ascenso vertiginoso en la escena pública tiene que ver con un despertar de las conciencias de la base de la pirámide social en la tierra gobernada por Gerardo Morales, en donde el famoso sincretismo cultural que la caracteriza está marcado en lo político por los dos partidos tradicionales que "no representan los intereses de los de abajo". Un agujero de identidad partidaria que viene a llenar la Izquierda, que en las últimas elecciones en Jujuy obtuvo el tercer lugar a tan solo un punto del Frente de Todos.
"Que haya ganado la izquierda en Jujuy es algo histórico, muestra una canalización de la bronca social hacia los partidos tradicionales pero también el reconocimiento de una fuerza política que ha sido consecuente", agregó.
Alejandro Vilca, de recolector de basura a diputado nacional
Incentivado por su mamá, que vendía empanadas en San Salvador de Jujuy para mantener a sus cinco hijos, Vilca estudió arquitectura en la Universidad Nacional de San Juan pero a falta de recursos abandonó y volvió a la capital jujeña a trabajar en distintos rubros: fue albañil, heladero, vendedor de seguros, mozo, electricista y finalmente consiguió trabajo en el municipio capitalino.
Por otro lado, a partir de su indignación con la dinámica de la política local -que según su visión desprotegía a los trabajadores- en los noventa fundó el Partido Socialista de los Trabajadores (PTS).
Juntos y el Frente de Izquierda denunciaron destrucción y adulteraciones de boletas
Ante las precarias condiciones laborales de sus compañeros en el municipio de San Salvador de Jujuy, organizó una serie de protestas por las que en 2006 fue expulsado del sindicato de los municipales y "degradado" al puesto de recolector de basura en la zona de Alto Comedero. "Respondió a un castigo por parte del intendente municipal y el sindicato por haber liderado una rebelión de los precarizados", contó.
Desde ese entonces comenzó su militancia en los barrios que lo llevó en 2017 a conseguir una banca en la Cámara baja provincial y a las históricas elecciones generales del pasado 14 de noviembre que lo catapultaron a la política nacional a pesar de las reiteradas denuncias ante la Justicia por el robo de boletas y demás irregularidades cuya responsabilidad otorga tanto al oficialismo radical como al peronismo.
La histórica elección del Frente de Izquierda en la bipartidista Jujuy
"Acá en Jujuy no hay grieta, hay lazos carnales entre todos los políticos, en especial entre los dos partidos que más peso tienen, tanto los radicales como los peronistas", subrayó el dirigente a modo de análisis de la dinámica de la política local que de a ratos escala a nivel nacional por temas controvertidos como el de la dirigente de la Tupac Amaru, Milagro Sala.
"La Izquierda no tiene vínculo con el gobierno radical de Morales, que sirve de representante de la derecha acá, al igual que el peronismo. Son xenófobos, odian a los extranjeros. Son como señores feudales que gobiernan por decreto", agregó y denunció que tanto el PJ como el radicalismo "son cómplices, comparten los mismos intereses y desarrollan prácticas clientelares" en un territorio marcado por el flagelo de la pobreza, además de que asegura que no existe la oposición política.
Sergio Massa afirmó que Alberto Fernández "va a convocar al diálogo a la oposición"
En esa línea, destacó que su trabajo se trata de construir una alternativa que incluya a los trabajadores, que a su vez algunos están subrepresentados por sindicalistas "atornillados a los escritorios".
Entre sus propuestas se destacan la defensa del salario por encima de la canasta básica, la reducción de la jornada laboral, la democratización de los sindicatos, el 82% móvil para los jubilados, una ley intercosecha para proteger a los trabajadores golondrina, la defensa del acceso al territorio y al agua de comunidades originarias y obra pública.
"Es un desafío lograr que las propuestas adquieran un nivel nacional. Espero que mi experiencia desde Jujuy, el interior profundo, sirva para que otros trabajadores puedan organizarse para fortalecer la unidad nacional", concluyó.
cd / ds
