El ministro del Interior y Transporte y aspirante presidencial, Florencio Randazzo, volvió este miércoles a criticar al gobernador bonaerense, Daniel Scioli, y lo desafió a "debatir" públicamente con vistas a las elecciones internas del Frente para la Victoria.
Randazzo negó que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner le haya pedido que baje el tono de las críticas hacia Scioli ("Nunca me ha dicho eso", aclaró) y dijo que no le "preocupa lo que digan los dirigentes", en referencia a los diputados Diana Conti y Carlos Kunkel que salieron en respaldo del mandatario bonaerense.
En diálogo con Radio Del Plata, Randazzo planteó diferencias "ideológicas y de origen" con el gobernador y destacó una "diferencia importante" entre "quien es un militante y quienes abrazan la política por pasión" y "aquellos que ingresan por otra vía, como por ejemplo ser un deportista famoso como era Daniel Scioli".
El ministro se posicionó en las "antípodas" de las políticas que representa el gobernador al indicar que Scioli "tiene esa ida de política" de restaurar un pacto entre la política, los medios y las corporaciones. También cuestionó al establishment que "arma encuestas" y "promociona" la candidatura del gobernador a la vez que "instala la idea de que va a ganar Scioli", lo que da lugar al "oportunismo".
"Creo en la independencia de la política, soy un hombre que nunca he desteñido, no soy un hombre que hago política desde la farándula, que no utilizo a mi mujer a mis hijos. Tengo una diferencia abismal con muchos de los que, creo yo, representan otra cosa", enfatizó el funcionario.
Por su parte, Kunkel, en diálogo con radio América, apuntó hoy: "Con Scioli uno puede tener diferencias y puntos de vista parciales, cada dirigente tiene derecho a opinar, pero personalmente creo que fue inadecuada decir que ‘Scioli es un hombre de la década del 90, mucho más conservador’, cuando ha sido cuatro años nuestro vicepresidente y en dos períodos nuestro gobernador".
Consultado sobre las críticas que recibió de los legisladores Kunkel y Conti por sus dichos sobre Scioli, el jefe de la cartera dijo: "A mí no me preocupa mucho lo que digan los dirigentes" y se manifestó en desacuerdo con la idea “de la corporación política".
"Yo lo que estoy haciendo es expresando mi pensamiento, mis convicciones", se defendió. Y afirmó que en caso de que Scioli gane las PASO, escenario que, dijo, es "poco probable", el mandatario contará con su voto porque "en el peronismo, quien pierde acompaña".
Randazzo también cuestionó al intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, quien tras coquetear con el massismo resolvió ser precandidato a gobernador de Buenos Aires por el Frente para la Victoria y contaría con el apoyo de Scioli, al calificarlo como un "candidato light".
Consultado sobre quién lo acompañará como vicepresidente en la fórmula, Randazzo dijo que aún no está definido, aunque adelantó que en la decisión influirá la presidenta. Y recalcó: "Yo siento que tengo todo el acompañamiento de Cristina" en alusión a su candidatura para la Casa Rosada. En cuanto a su relación con la mandataria, Randazzo detalló que mantienen un vínculo "muy bueno, muy afable. Tenemos mucha confianza y hablamos muchas veces por día".
Además, la definió como "una mujer con enormes convicciones" que está "más preocupada por cómo los recuerde la historia" que la tapa de los diarios y consultado sobre una eventual candidatura a legisladora de la presidenta pidió "dejarla tranquila. Cristina ha dejado mucho en estos años".