La Corte Suprema de Justicia resolvió ayer reabrir la investigación por la muerte de Lourdes Di Natale, la ex secretaria del empresario Emir Yoma, cuñado y ex asesor de Carlos Menem, que había denunciado vínculos con el tráfico de armas a Ecuador y Croacia y falleció en extrañas circunstancias.
En un escrito escueto de tan solo dos párrafos, el tribunal emitió un fallo donde sostuvo: "Esta Corte comparte y hace suyos los fundamentos y conclusiones de la señora Procuradora Fiscal subrogante, a cuyos términos se remite en razón de brevedad", y por ello "se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto el pronunciamiento apelado".
"Notifíquese y devuélvanse los autos al tribunal de origen para que, por quien corresponda, se dicte uno nuevo", añadió la resolución firmada por Ricardo Lorenzetti, Elena Higthon de Nolasco, Juan Maqueda y Carlos Fayt. La Corte apoyó en todos sus términos el dictamen de la fiscal Irma García Netto, quien consideró que Casación archivó "en forma arbitraria" la investigación de la muerte de Di Natale.
Para la fiscal, Casación "convalidó el cierre anticipado de una investigación en la que no se agotaron las posibilidades de reunir pruebas conducentes en un delicado hecho", y faltando la declaración de la hija de Di Natale, hoy mayor de edad. Incluso la presidenta Cristina Fernández de Kirchner había criticado la investigación tras la muerte del fiscal Alberto Nisman.
Di Natale fue una testigo clave en la causa por contrabando de armas a Croacia y Ecuador, porque como secretaria de Yoma había tenido acceso a detalles sobre la negociaciones abiertas con esos países en la década de los 90. La mujer denunció amenazas constantes y poco después de realizar su declaración en la causa por la voladura de la fábrica militar de Río Tercero (considerada intencional para tapar el faltante de armamento enviado a territorio croata y ecuatoriano) apareció muerta el 1 de marzo de 2003 en el patio interno de un edificio de Barrio Norte de Buenos Aires junto un cuchillo de cocina.
La causa instruida por el juez Ricardo Farías determinó a los cinco meses del incidente que la mujer cayó cuando quiso cortar un cable de televisión de un vecino, pero hubo elementos que hacían sospechar que quizá no fue un accidente: sus huellas no fueron halladas en el cuchillo y tenía en el cuerpo un dosaje similar a un coma alcohólico.
En 2004, la Sala IV de la Cámara del Crimen revocó el archivo de la causa y ordenó reabrirla para tomar más declaraciones y cruzar llamados telefónicos. La jueza Fabiana Palmaghini, nueva magistrada del caso, ordenó una reconstrucción de los hechos pero la causa se cerró nuevamente y en 2012 la Cámara confirmó la decisión ante "la imposibilidad de ahondar por otros medios sobre la hipótesis delictiva que sostiene la querella".
La familia Di Natale apeló la medida pero Casación no admitió el planteo. Ahora la Corte hizo lugar resaltando los argumentos de la Procuración, que pide interrogar a la hija de Di Natale. La Fiscalía también destacó que, a criterio de la querella, "el juez no tuvo en cuenta lo aprehendido en la reconstrucción de la caída que, a su entender señalaba que fue un homicidio" por "la imposible ebriedad" con "imposibilidad de movimientos".