El presidente de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, negó hoy que el vuelo 1204 a Uruguay, que se agregó con motivo del partido que jugó la selección de futbol en Montevideo, fuera "un capricho de algún amigo del poder", aseguró que dejó ganancias y aseveró que todos los pasajeros pagaron el pasaje.
La respuesta del funcionario fue a raíz de las denuncias periodísticas que advirtieron que en el vuelo habían viajado dirigentes kirchneristas con pasajes adquiridos a un precio preferencial y que, por lo tanto, se había ocasionado pérdidas a la compañía.
En diferentes declaraciones radiales y durante una conferencia de prensa en el Congreso, Recalde aseguró que todos los pasajeros pagaron alrededor de 100 dólares por pasaje y aseguró que el vuelo generó una ganancia de 10 mil pesos para Aerolíneas Argentinas. En rigor, los valores que dio Recalde del pago de su pasaje fueron cambiantes: a radio Mitre le dijo que había oblado "entre 200 y 300 dólares", luego, en conferencia de prensa habló de "cien dólares" y un rato más tarde contestó "ciento y pico".
En rigor, los valores que dio Recalde del pago de su pasaje fueron erráticos: a radio Mitre le dijo que había oblado "entre 200 y 300 dólares", luego, en conferencia de prensa habló de "cien dólares" y un rato más tarde contestó "ciento y pico".
"Fue una decisión comercial, no fue un capricho de algún amigo del poder", afirmó. Recalde reconoció que entre los pasajeros estuvo Facundo Moyano, uno de los hijos del líder de la CGT, y vinculó la denuncia periodística con el empresario Antonio Mata.
En tanto, el diputado demócrata Omar de Marchi ratificó su pedido para que el Gobierno informe si la lista de pasajeros del avión que se agregó por el partido Argentina-Uruguay incluyó a sindicalistas y referentes kirchneristas . "Uno de los puntos centrales del pedido de informes es la lista (de pasajeros), que consta en Migraciones, y que si no viviéramos en el país del ocultamiento, estas cuestiones ya la tendríamos en nuestras manos", agregó el legislador en declaraciones a radio Continental.
"Yo pagué el boleto entero como cualquier pasajero", se defendió Recalde, quien concurrió al Congreso para informar sobre la situación de la empresa, en una reunión a puertas cerradas donde se le impidió el ingreso a la prensa.
A su vez, el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, pidió "desdramatizar" la decisión de agregar un vuelo y consideró que "fue muy exitoso desde el punto de vista económico". Lo que no es exitoso es el déficit de Aerolíneas: Schiavi y Recalde admitieron en el Congreso que se pierden 500 millones de dólares anuales y que recién en 2013 podría pensarse "en un punto de equilibrio".
Fuente: DYN