Tras una semana marcada por la preocupación sobre el rumbo de la economía, el presidente Mauricio Macri se reunió este sábado en la Quinta de Olivos con la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para analizar las medidas fiscales que se enunciarán el lunes.
En medio del nerviosismo y la desconfianza de los mercados que llevaron al dólar de 31,54 pesos a 37,99 en cinco días, el jefe de Estado apeló a la mesa chica para evaluar el panorama económico y político, ya que la profundización del ajuste se dará en la previa de las elecciones de 2019, según consignó la agencia NA.
Entre la preocupación y la furia, Macri se resiste a los cambios
El encuentro se da después de que el pasado jueves el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, anticipara que el lunes anunciará medidas fiscales tendientes a redoblar los esfuerzos para achicar el déficit, y un día después viajará a reunirse con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para realizar un nuevo acuerdo que adelante los envíos del crédito acordado meses atrás.
El cónclave en la Residencia Presidencial de Olivos también se da en medio de una fuerte oleada de rumores sobre cambios de nombres en el Gabinete e incluso de disminución de la cantidad de ministerios, para así reducir el gasto del Estado.
El últimos viernes los principales colaboradores de Cambiemos se reunieron en Olivos con el jefe de estado, quien también mantuvo diálogos con dirigentes y economistas de otros espacios: el objetivo de Macri es escuchar la mayor cantidad de puntos de vista para intentar implementar una serie de medidas que logren sacar adelante la economía nacional.
M.S.
